Al hilo del runrún que suele preceder a las asambleas, siempre surgen dudas sobre la contabilidad, la fundación, la auditoría ...
Y los legos suelen mostrar cierta perplejidad al ver que lo que ellos creían una ciencia exacta está sujeta a interpretaciones.
Trataré, si es que es posible hacerlo sin soltar un ladrillo ilegible, de aclarar un par de conceptos para ayudar en la medida de lo posible a aquellos compromisarios interesados en el asunto.
La imagen fiel
La contabilidad tiene, o debería tener, el objetivo de ofrecer a los gestores y accionistas de una sociedad (o a los directivos y socios de un club de fútbol) información fiable de cómo están las cosas. De cómo están de verdad.
Lamentablemente, no siempre es así. Unas veces la fiscalidad aconseja reducir el resultado positivo para pagar menos impuestos o al menos diferirlos. Otras veces el deseo de ofrecer una buena imagen a los bancos o a los propietarios puede llevar a lo contrario, a tratar de hacer ver que las cosas son mejores de lo que son.
En el Athletic nos enfrentamos generalmente a la segunda situación. Y dada la peculiar legislación deportiva, y el carácter de permanente precampaña en el que vivimos, es legítimo preguntarse si los apaños que se hacen son por el bien del club a largo plazo (por mejorar su capacidad de negociación ante prestamistas, por jemplo) o por el contrario obedecen al deseo de los directivos de atenuar su responsabilidad y mejorar su imagen de cara a un futuro proceso electoral.
Y por otra parte, ante cualquier manipulación contable cabe preguntarse cuando deja de ser una opción legítima y cuando empieza a ser un maquillaje injustificable.
Las manipulaciones contables
Al hablar de manipulación contable cabe distinguir entre el maquillaje (interpretación subjetiva de los criterios contables para alterar el resultado considerado razonablemente como "real") y la realización de operaciones reales pero artificiales cuya razón de ser es conseguir esa alteración.
Y a su vez, cada uno de esos dos tipos de operaciones puede ser legal o ilegal.
Excluiré las operaciones ilegales: me parecería totalmente ilegítimo sugerir siquiera esa posibilidad desde el anonimato de este blog, no tengo ninguna razón para suponer semejante cosa y además en ese caso no habría mucho que aclarar: sería inadmisible y punto.
De entre las legales, empiezo por el llamado "maquillaje contabe" o sea: la utilización de los márgenes que deja la normativa contable para valorar determinadas operaciones. En estos casos, es opinable donde está el límite. Si nos ponemos estupendos, la tolerancia debería ser el 0%: como gestores delegados por los socios para administrar el patrimonio común, su obligación es presentar las cuentas reales calculadas con criterios esctrictos y de acuerdo con lo que diga el ICAC (Instituto de Contabilidad y Auditoria de Cuentas, organismo que marca esos criterios) Sin llegar a esa esquisitez, podríamos admitir un cierto grado de "creatividad": a veces la normativa contable permite aplicar criterios distintos y no siempre está claro cual es el que más refleja la deseada "imagen fiel".
Las claves, cuando hay un indicio de maquillaje, serían (a mi juicio):
1) ¿Va frontalmente en contra de lo que se considera práctica habitual?
2) ¿Tiene una importancia económica suficiente para considerar que altera sustancialmente la realidad?
En cuanto al punto "1" considero que el criterio básico para el lego en la materia debería ser fijarse en lo que diga la auditoría. Sí: ya sabemos que esta no siempre es fiable, pero estoy hablando de dar un criterio básico a una persona inexperta que no puede bucear por sí mismo en las cuentas, o para la experta que por el grado de información que da el club no pueda formarse una opinión sólida.
Desde ese punto de vista, la existencia de una salvedad debería interpretarse como que la directiva ha forzado un criterio contable más allá de lo aconsejable y en contra de los criterios generalmente aceptados.
En cuanto al punto "2" eso ya queda al criterio de cada uno. Algunas orientaciones serían el porcentaje que supone sobre el total del presupuesto, que cambie o no el sentido del resultado, que sin hacerlo suponga una diferencia sustancial ...
En este caso la auditoría ha emitido una salvedad de más de dos millones de euros. Es más o menos el 25% del resultado y aproximadamente el 4% del presupuesto. ¿Es suficiente para decir "no" a las cuentas? Ya verá cada uno: a mí el 25% del resultado no me parece muy significativo, pero el 4% del presupuesto si me parece una cantidad de cierta importancia.
Otras manipulaciones
Luego está el tema del realizar o no operaciones reales pero artificiales para poder alterar el resultado.
No tengo ni idea de que se hayan hecho. Pero la operación típica, la de manual, es la de adelantar o atrasar transacciones entre empresa vinculadas para adecuar sus cuentas a gusto del consumidor. Cuando además esas empresas tienen cierres contables distintos, se puede hacer un peloteo de ida y vuelta que no acabe nunca y que cree una manipulación en espiral peligrosísima. Las posibilidades de hacerlo aumentan exponencialmente cuando la empresa vinculada susceptibles de servir para estos fines es absolutamente opaca al órgano de control de la empresa "central".
En estos casos, no hay criterio (no puede haberlo por falta de información) para juzgar a posteriori, pero sí lo hay para prevenir a priori. Es ahí, en la prevención, donde a mi juicio debería centrarse el órgano de control de la "central".
En nuestro caso, la existencia de la Fundación, el que cierre el año contable en fecha distinta a la del Athletic, la extraña variabilidad de sus aportaciones o retiradas de fondos, y la poquísima -por no decir nula- información que de sus cuentas se da a los compromisarios, son otras tantas señales de alarma.
Creo que cualquier compromisario, sepa o no de contabilidad, debe preguntarse si con la información que tiene de las cuentas de la Fundación puede hacerse un juicio sobre las cuentas del Athletic, o incluso si aunque no se lo haga de forma negativa, no prestaría un servicio al Club negándose a aprobar las cuentas hasta que se arroje más luz sobre ese importante ámbito de la gestión del Athletic.
No creo que se pueda decir mucho más sin caer en la repetición o en un detalle incomprensible para todos menos aquellos que precisamente no necesitan que se les aconseje. Espero haber sido de alguna utilidad para alguien, y que el renano no se me enfade por el segundo ladrillo asambleario consecutivo. Mañana espero colgar el tercero, por cierto.
Respecto a la salvedad, repito lo que he dicho en la web amiga.
ResponderEliminarLa cantidad de 2.5 millones de la salvedad (independientemente de la relatividad de la cifra), supone que la pérdida del todo o parte, se traslade a ejercicios posteriores.
Si mañana hubiera elecciones anticipadas, sin aprobar las cuentas ¿las reformularían los entrantes, sólo por este concepto?
¿Considerarían que por 2.5 millones, no merecería la pena?
La pregunta importante es. ¿Existe una contabilidad paralela?
ResponderEliminar"¿Existe una contabilidad paralela?"
ResponderEliminarY para lelos tambien.
No legolas, lo que existe es una contabilidad para lelos.
ResponderEliminarJoder Sagu, igual de cabrones , igual de rapidos.
ResponderEliminarSí.
ResponderEliminarSiempre que hay un maquillaje o manipulación, hay una contabilidad paralela: el gestor la necesita como herramienta de gestión.
Por ejemplo: si hay una empresa que amortizando un activo con criterios lógicos da un beneficio de 100, pero acogiéndose a una libertad de amortización legal puede darlo de 50 ahorrándose 14 de impuestos, por supuesto lo hará.
Pero en alguna parte tendrá apuntado que su beneficio real antes de impuestos fue de 100 y con eso tomará decisiones.
Además, en la caso que nos ocupa (el Athletic) según la prensa, los directivos dimisionarios se han quejado de que no les dejan ver la contabilidad "real".
"Joder Sagu, igual de cabrones , igual de rapidos."
ResponderEliminarNo se porque...esta mañana me he despertado con la necesidad imperiosa de comprar un bidón de gasolina y cerillas....jajaja
"No se porque...esta mañana me he despertado con la necesidad imperiosa de comprar un bidón de gasolina y cerillas....jajaja"
ResponderEliminarSerá por el frío...
Pon la calefacción!!
que panda mamones!!!
ResponderEliminarDe todas formas la situación económica del athletic viene derivada de 2 jo putas con mayusculas el vinatero y el abogado.
Sobre el principio de imagen fiel siempre aplico el siguiente razonamiento:
ResponderEliminarSi muchas veces los conyuges, que se supone que están unidos hasta que la muerte los separe y en la salud y en la enfermedad, son infieles, cómo vamos a pretender que la magen de una empresa sea fiel.
Lo lógico es que dicha imagen se vaya por ahí de picos pardos con el primer ajuste por periodificación que conozca un sábado por la noche en un balance.
Cincinato, Jaburu, una duda:
ResponderEliminar¿Una salvedad es lo mismo que sálvese quien pueda?
Bueno. Tengo una solución magnífica para quien no resista la Asamblea. Me ha dado la idea una enferma mental que acaba de pasar por el despacho.
ResponderEliminarResulta que esta noche no podía dormir por el ruido de los vecinos y no encontraba los tapones para los oidos. Total que ni corta ni perezosa se metió DOS GELOCATILES! en las orejas.
Dice que ha dormido de puñetera madre, el problema es que no se los puede sacar. Ahora mismo está en la enfermería ya os contaré que tal, pero en principio no me parece nada descabellado poner un puestito de Gelocatil a la entrada del Euskalduna.
KROMA dijo...
ResponderEliminarDice que ha dormido de puñetera madre, el problema es que no se los puede sacar. Ahora mismo está en la enfermería ya os contaré que tal, ...
Ahora que lo dices, estoy dudando si, contablemente, un gelocatil atascado en el oido sería "otro inmovilizado material", un "depósito constituído a largo plazo" o, si fuera del grupo 3, un "elemento o conjunto incorporable"
Querido maestro Tao. Me informan desde enfermería que la base de los gelocatiles ha comenzado a deshacerse.
ResponderEliminarPor lo tanto yo creo que el encaje adecuado es la cuenta 810 Pérdidas por coberturas de flujos en efectivo.
Eso por descontado si estamos hablando de la contabilidad B
En la contabilidad A no creo que hayas dudas respecto a que el encaje adecuado sea en la cuenta de materias primas, teniendo en cuenta que los gelocatiles a pesar de ser consumidos poco a poco, habrá que cargarlos al final del ejercicio por el importe de la existencias al cierre junto a las tiritas, las vendas y el betadine.
Lo de siempre, en torno a los 100.000 euros.
TAOTEKING pregunta:
ResponderEliminarCincinato, Jaburu, una duda:
¿Una salvedad es lo mismo que sálvese quien pueda?
No, más bien es como el Sálvame...pero de luxe.
lO DEL GELOCATIL .........................
ResponderEliminarBUENÍÍÍÍÍÍSIMOOOOO!!!!!!
(TODO, TODO... los flujos,... genial... )