¿Qué tiene él que no tenga yo?

La escena, con múltiples variantes, se ha repetido muchas veces en comedias americanas más o menos malas, o más o menos inspiradas: el protagonista, harto de que la chica de sus sueños solo tenga ojos para el gilipollas guaperas de turno, se anima a preguntar: "¿Qué tiene él que no tenga yo?"

Ese suele ser el momento en el que el director hace un corte y en la siguiente escena se le ve a la chica hablar sin parar, con un entorno que sugiere que han pasado ya varias horas sin que haya acabado de agotar el tema sugerido por el pardillo del protagonista.

Ese asunto (qué tiene ...) ha sido tratado recientemente por varios sesudos estudios de diversas universidades, que han intentado averiguar qué hace que las mujeres se decidan por el macho alfa que resulta tremendamente atractivo, aunque por eso mismo más proclive a ser agresivo e infiel; o por el más normalito especimen que promete más cariño y menos pasión. Tema apasionante, pero que se sale del alcance de esta entrada. Lo dejo en la recámara por si vale la pena sacarlo en función de la deriva, imprevisible como siempre, que puedan tener vuestros comentarios.

A lo que voy es a que, viendo el pesimismo que parece anclado en el entorno zurigorri ante la eliminatoria contra el Barça, me identifico con el postergado protagonista de esa comedia tipo.

Escucho y escucho que, no es que nos vayan a eliminar, sino que esta tarde nos van a dar tal paliza que ni siquiera va a tener sentido jugar el partido de vuelta. El ambiente a mi alrededor es tal que algunos dan la sensación de que firmarían un 3-0.

Pues yo me rebelo. No me resigno a aceptar eso.

Y me dan ganas de preguntar: ¿Qué tienen ellos que no tengamos nosotros?

Solo que no me refiero al Barça. Me explico.

A pesar de su incontestable superioridad, Madrid y Barça no juegan todos los años la final de la copa. Muy frecuentemente algún equipo inferior da la sorpresa y elimina a uno o a los dos gigantes.

A esos "ellos" me refiero. ¿Por qué no podemos ser nosotros este año?

El que llevemos una racha de juego horrible o que nos falte nuestro delantero de referencia no me preocupa demasiado. Somos especialistas en jugar fatal contra los malos y cuando menos se espera hacer un buen partido contra los grandes.

No sé que más decir. Solo que estamos dando la impresión de que el Barça tiene la eliminatoria ganada sin jugarla, y eso me parece penoso. ¡Qué somos el Athletic, coño! Vamos a competir y a ponérselo difícil. Nos lo debemos a nuestra nuestra historia. Y tanto complejito ya me cansa.