lunes, 25 de septiembre de 2017

Hastío


Si llevo una pila de tiempo sin escribir una entrada es, básicamente, porque ciertas complicaciones en mi vida personal y profesional (deseadas las primeras, no así las segundas) me han quitado el tiempo que normalmente hubiera dedicado al Ambigú.

Pero creo además que también me influye, aunque me cueste admitirlo, que estoy empezando a sentir un cierto hastío por el fútbol.

Como muestra un botón: el domingo preferí ver la corrida de toros de Victorino en Logroño al partido del Athletic en Málaga. La semana anterior, que también coincidió el partido de Las Palmas con otra corrida, fui fiel a los colores zurigorris y el resultado fe una desagradable mezcla de cabreo y aburrimiento. Así que no quise tropezar dos veces tan seguidas con la misma piedra y parece que acerté. La corrida fue buena y el partido... ¡Pufff! Tenía activada la app de la liga para estar al tanto de goles y expulsiones, y al ver que nos poníamos 1-3 y ellos con uno menos pensé que teníamos los tres puntos en el zurrón. Cuando recibí los sucesivos avisos con los goles del Málaga, ese Málaga en inferioridad que aún no había sumado ningún punto, no podía dar crédito.

Creo que no hace falta haber visto el partido para compartir la indignación que sentís y que habéis manifestado en la entrada anterior. Lo que no sé si compartir es la condena a Ziganda. Partidos de estos tenemos todos los años y no estoy seguro que sea un mal del entrenador. Sigo pensando que a un entrenador nuevo hay que darle un poco más de tiempo para juzgarle, así que aunque está claro que la alarma ya está activada, de momento sigo a la espera.

Pero no quería incidir en esto. Ya me explicaré mejor en sucesivos comentarios, si tengo ocasión.

Lo que quiero deciros es que la frecuencia de los partidos, los vicios de la competición, los horarios, el carácter invasivo que el fútbol ejerce en casi todos los ámbitos de la sociedad, la sensación de que el ciclo objetivos/desilusiones del Athletic es como un día de la marmota a lo bestia, las trampas al solitario, los problemas y mercadeos a la hora de retener cualquier jugador medio ilusionante... Me estoy sintiendo cada vez más despegado del fútbol, y eso no solo respecto al fútbol en general (que viene de antiguo) sino incluso empiezo a notar síntomas de que me empieza a pasar también con el Athletic. Cosa que me desagrada, pero que no puedo evitar.

Hablando de hastío, hoy me ha dado la puntilla lo que he leído en El Correo: la UEFA se ha sacado de la chistera una nueva competición de selecciones llamada "La Liga de las Naciones" que se suma a los mundiales y a las eurocopas. No sé vosotros, pero yo ya no puedo más con este montaje mercantil.