En vista de que la bruja Nowanda sigue enfadada y no nos deleita con su crónica del partido, voy a intentar hacer un resúmen de lo acontecido el domingo en Zubieta.Como ya me conozco el percal de la afición realista me coloqué en una esquina alejada de la gente y con música a tope (cosa que también hago en San Mames para no oir los comentarios e insultos a jugadores de los de alrededor) para que no me llegaran los comentarios de estos aficionados que como siempre buscan la boca y últimamente al mejorar su equipo ellos también han aumentado la amplitud de su boca y la verdad es que se le quitan a uno las ganas de ir.
El partido empezó bien, con dos llegadas que pudieron habernos puesto por delante. La Real no creaba peligro pero a medida que pasaban los minutos se posicionaba mejor en el campo e impedía que las nuestras pudiesen acercarse. En estas un fallo en el control de Marta y un poco de falta de contundencia en la disputa hizo que una realista se presentara sola ante Sensi y marcase el primer gol. A partir de ahí nada de nada, ni por un lado ni por otro lo cual favorecía claro está a la Real.
En la segunda parte entró Erika para intentar darle más profundidad al ataque, pero la primera ocasión fue para la Real que en su única llegada clara en todo el partido (ya que el gol fue un regalo) pegaron en el poste.
Pasaban los minutos y no llegaba el gol del empate y los guipus se iban creciendo y faltando al personal.
El Athletic tuvo una llegada clara por parte de Erika a pase de Nekane, pero su remate fue al medio de la porteria y le pegó a la portera y un posterior disparo de Tzibi desde lejos que la portera desvió al larguero. Y cuando todo parecía acabado y los fornidos guipuzcoanos ya lo celebraban y seguían creciendo en volúmen y en boca, llegó el regalo por parte de la portera de la real, que en un centro sin mucho peligro ya en el 90 por parte de Iraia regaló el balón a Olabarrieta que no se lo creía y metió el balón dentro.
Silencio total por parte de la grada donostiarra y algarabía por parte bizkaina.El árbitro alargó 7 minutos más el partido y salieron algunos malos modos de alguna jugadora de la real que hizo una entrada sin balón a Marta que tuvo que salir lesionada y aquí noté un poco de falta de cintura del entrenador que hizo jugar al equipo los últimos tres minutos con una menos teniendo posibilidad de que entrara una jugadora y lo cierto es que hubo dos faltas y un corner en contra que se jugaron en inferioridad sin necesidad de hacerlo.
En fin empate justo y la pena es que se traslada el mal rollo del masculino a la grada del femenino que nunca había habido problemas.
¡Ah! afortunadamente siguen sin ganarnos, y la verdad es que nunca han estado tan cerca. Es una espinita que tienen bien clavada.
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6 comentarios:
Rote,
Una pena que el mal ambiente se haya trasladado también al femenino, pero parece un mal endémico , ya que también debe ser igual en categorías inferiores, digo escolar, con algunas actuaciones de padres, niños, entrenadores,... de todo menos edificativo.
Buf... qué sociedad estamos creando!!! (Sociedad, suciedad... se parecen tanto...)
Pena haber perdido dos puntitos pero tal y como haces la crónica parece que se ganó uno, así que... habrá que mirarlo por lo positivo.
Yo tampoco entiendo que se jueguen los 3 últimos minutos con una jugadora menos
Jode Rote...me dejas flipado! No me hago a la idea de lo que puede ser un partido del femenino con ese ambiente tan enrarecido.
Lo que faltaba. Todavía recuerdo no hace mucho que llevar a las criaturas a ver un partido a Lezama de las neskak era un gozada por el ambiente y por lo que se veía en el terreno de juego. Por lo que parece estamos abocados a reproducir los esquemas de los varones.
En cuanto al resultado, por lo que parece y a pesar de haber ganado un punto, el resultado es un paso atrás respecto a anteriores resultados.
El ambiente enrarecido solo existe en Zubieta y solo por una parte de gente que se ha apuntado al carro ahora que han mejorado sus resultados y que además está resentida contodo lo que signifique Athletic o Bilbao. Conozco a muchos seguidores de la Real femenina antes de que fuese siquiera Real, cuando estban en otros equipos y la verdad es que tanto antes como ahora la relación es cojonuda, pero estos jóvenes recien llegados están a las duras y quieren guerrear y como con los tíos se tienen que joder porque no hay pelea de momento, buscan zizañar con las chicas.
El resultado es malo el empate nos obliga a no fallar y esperar a que el rayo falle dos veces y dudo que eso ocurra (las dos cosas), pero vuelvo a repetir lo que he comentado otras veces, quedar terceras es un éxito.
Es tipo de comportamiento nada tiene que ver con el futbol, o el deporte en general.
Una lástima.
Siempre es en territorio guiputxi donde hay follones, para creer en pantomimas de hermanadas las aficiones vascas
La envidia y la mala uva no entienden de sexos.
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