Qué bello es vivir!...

Película maravillosa donde las haya, que engrandece la miserable a veces existencia humana... y nos hace valorar "el privilegio" que es luchar por nuestros ideales.

El film destila a lo largo del metraje buenas intenciones y grandes valores, entre los cuales destaco el concepto de que vale la pena vivir a toda costa aún con problemas aparentemente insolubles que parecen agobiarnos la existencia.

Al acabar de contemplar esta obra maestra de Capra, uno tiene una indefectible sensación de optimismo y de haber visionado algo que no envejecerá nunca....

Pues bien, amigos, al igual que el desesperado banquero a la fuerza George Bailey (James Stewart) la noche de Navidad del año 45, que quería lanzarse desde un puente a las frías y turbulentas aguas, os confesaré que yo también, abrumado por la negligente gestión del Club - y, sobre todo, por la pérdida de aquellos valores esenciales del Athletic que yo heredé-, he estado a punto, estas semanas, de tirar por la borda mi existencia zurigorri...

Incluso creo que, al igual que George, llegué a gritar en soledad:

- !Ojalá no hubiera nacido!... !rojiblanco!...

Espero que San Mamés me perdone alguna vez por ello...

Justo cuando va George a suicidarse aparece en escena un personaje (en realidad, un Ángel enviado por Dios) que le dice enigmáticamente:

- ¿Extraño, verdad?... La vida de cada hombre repercute en tantas otras vidas, que cuando uno no está, deja un profunfo vacío...

Y le hace así reflexionar sobre lo valiosa que ha podido ser su existencia sin él suponerlo... y lo mucho que ha repercutido para el bien de sus amigos y convecinos del pueblo de Bedford Falls. El Ángel le concede un privilegio: poder contemplar lo que hubiese acaecido en su pueblo si él no hubiese existido...

Después de esto, George — un tipo estupendo y con un gran corazón — recupera la alegría de vivir...

Aunque Bailey pueda parecer un ser sencillo, y sobre todo un ingenuo, esta apariencia es algo sumamente engañosa... George posee una gran preparación, tiene carácter y también su dosis de ambición,... es decir, los mismos atributos y suficiente valía que podrían haberle convertido, siendo banquero, en otro monopolista al estilo del avaro Sr. Potter, su oponente bancario...

Pero Bailey no escoge ese camino del egoísmo y, llegado a cada una de sus encrucijadas problemáticas en su relación con sus familiares y amigos, él siempre opta por el sacrificio personal y la renuncia a sus aspiraciones en beneficio de aquellos que le rodean y aprecia.

Esa nobleza y altruismo difícilmente casan con la escala de valores imperante en ese momento en su entorno social, en el provinciano Bedford Falls, lugar en el que, como en todos, primaba la ambición desmedida y el individualismo a ultranza.

Pero el problema no estriba en que la bondadosa forma de ser de Bailey sea algo trasnochada, anacrónica, que nos trasmita un mensaje envejececido, de perdedor. El asunto radica en que los tiempos que corren "son como son".

Es fácil encontrar en el 2007 un cierto paralelismo entre la existencia de Bailey en su particular hábitat y el declinante devenir del Athletic estos últimos años en esta nueva época futbolística que corre por la Liga de las Estrellas...

Esa forma romántica de entender la competencia, esa entereza frente al handicap aparente de jugar en desventaja, primando una serie de valores intrínsecos, inherentes a su legado y existencia como Club centenario, y sublimándolos por encima de la gloria efímera de un título, es lo que hace que convirtamos "la debilidad en fuerza", aunque seamos vistos por los "Potters" de turno como un equipo aparentemente ingenuo y "demodé" ...

Y al igual que George, por una serie de acontecimientos negativos concatenados, hemos llegado a fecha de hoy a una encrucijada lastimosa... ya que últimamente damos una sensación papupérrima... que así, con esa idiosincracia, con esa filosofía romántica, no vamos a ninguna parte,... que somos una especie de último mohicano en vías de extinción, y condenados al suicidio colectivo... mientras que ellos, "los capitalistas", esos "Potter" que juegan sin más valores que los del ganar a toda costa, tienen mas garantía de lograr el éxito en ese medio hostil e implacable, donde el prestigio, el dinero y el poder son los únicos parámetros que sirven para la victoria...

En realidad !Que bello es vivir! plantea un choque de filosofías... una dualidad de maneras de ser y coexistir con tus semejantes... aparentemente la de George hasta quizás peque de "tontorrona",... pero hay una diferencia sutil... George es bueno y altruista porque él así lo ha elegido expresamente,... y es consciente de ello en todo momento,... no porque no tendría dones o formación como individuo para haber elegido la otra opción mas egoísta que encajaba perfectamente dentro de ese entramado social de Bedford Falls en el que sobrelleva su peculiar forma de ser,...

En realidad, George es un pequeño héroe cotidiano y anónimo, ya que la vía elegida por él para el día a día obviamente es la más dura, la mas difícil y la que te obliga a mayores sacrificios... pero también, a la larga, cuando echas la vista atrás, como en ese flashback cinematográfico gracias al Ángel que le da esa oportunidad, es también aquella existencia cotidiana que, a la larga, te proporciona mas satisfacciones personales y más te llena de orgullo cuando alcanzas un pequeño momento de gloria...

El Athletic y su afición también han elegido un camino de espinas mas que de rosas... y su decrépita imagen actual, otrora una estampa gloriosa, también trasluce una estética de traje de polvoreta,... de sociedad arcaica anclada en el tiempo, abocada al fracaso de sus obsoletos valores y a la desaparición a corto plazo, como un dinosaurio en la glaciación,... y todo por ese no saber adaptarse a los nuevos tiempos...

Por eso, cuando con once aldeanos, ganamos al declarado mejor equipo de Europa en el año 2007, sacando del baúl de los recuerdos esos valores de antaño casi olvidados, como la raza,... el espíritu de sacrificio,... la garra... el sentimiento... y ves que se entra en esa catarsis de complicidad equipo-afición que nos hace invencibles,... la alegría se desborda y a uno no le queda mas remedio que olvidarse de "las renuncias" por ser como somos... y exclamar:

Qué bello es vivir!... en rojo y blanco!...

Traigan algo de beber!... La casa invita!....



Aunque sospechemos que sólo nos dure la euforia hasta este miércoles a la noche...