martes, 29 de junio de 2010

¡Recordad Aljubarrota!

El 14 de Agosto de 1385 las tropas portuguesas, mandadas por Juan I de Portugal (aunque el mando efectivo más bien lo ejerció su condestable Nuno Alvares Pereira), infringieron una gran derrota a las tropas castellanas de Juan I de Castilla.

Aunque durante el reinado de Felipe II ambos reinos se reunificaron y no fue hasta 1640 cuando Portugal alcanzó definitivamente la independencia, es Aljubarrota el hito que ha permanecido vivo entre los portugueses como símbolo de su independencia y es Aljubarrota el nombre que les viene a los labios cada vez que quieren tocarle las pelotas a un vecino español, aunque éste generalmente no sepa de qué le hablan: si la cultura de la historia se está perdiendo, no digamos nada de lo que se refiere a las derrotas. "¿Dónde está Alesia? No existe Alesia", que diría un galo irreductible.

Pero los portugueses sí recuerdan, y si hoy Portugal derrota a España estoy seguro de que más de un periódico luso -y más de dos- titulara mañana "Un nuevo Aljubarrota", o algo por estilo. Sí: el nombre de esa villa portuguesa será más pronunciado hoy en el país hermano que el propio nombre de Green Point, el campo en el que tendrá lugar la batalla.

Porque hoy tenemos una batalla hispano-lusa en toda la regla. ¿Acaso no fue von Pistonwitz el que definió el fútbol "como la continuación de la guerra por otros medios"?

Lo que para mí, que añoro un único estado hispano-luso con capital en Lisboa (posibilidad que existió y que se perdió por la afición a la caza de Felipe II y el centralismo suicida de sus sucesores) es un duelo fratricida que lamento y que hubiera preferido en la final, se está centrando demasiado en la figura de ese "ser" llamado Cristiano Ronaldo.

Cristiano Ronaldo, es ese jugador prodigioso capaz de lo mejor y de lo peor, que ya me sacaba de quicio cuando jugaba en el ManU y que lo acabó de rematar cuando entró en el equipo que le va como un guante: el Real Madrid.

Ronaldo es un jugador desequilibrante, que va a tener la virtud de ponerme fervorosamente a favor de España: es inevitable verle en el campo y no desear que pierda, como recordaba hace poco algún colaborador de este blog.

Pero con tanto Ronaldo, y con tanta especulación sobre cómo pararle, se está presentando lo de hoy como una partida dependiente solo de un factor. Parece que si se le para a Ronaldo el partido está ganado, pero Portugal es más que Ronaldo. Y España no está siendo tan buen equipo como creíamos.

Para empezar por los lusos, un pequeño detalle: no han encajado un gol en todo el campeonato. A los amantes de fútbol espectáculo este dato les parecerá triste, pero los grandes equipos y los equipos campeones, mal que nos pese, se empiezan a construir desde la defensa. Y ni brasileños ni marfileños han sido capaces de horadar la meta portuguesa, que cuenta con un bloque muy sólido.

Y en cuanto a España ... la derrota frente a Suiza, que muchos atribuyen a la mala suerte, yo prefiero atribuirla a un juego mediocre; y no por ganar con claridad a una banda como la de Honduras se puede decir que las dudas se disiparan.

Como no ví el partido ante Chile, poco puedo opinar de ese último test antes de empezar el Mundial de verdad, pero me dicen que España marcó cuando mejor jugaban los chilenos (que ayer me parecieron un equipo ordenado y voluntarioso pero con nada en la delantera) y que la segunda parte ante diez fue una birria.

Así que a mí se me antoja que el partido va a estar muy abierto, y que como nos obsesionemos con Ronaldo la sorpresa puede venir por otro lado.

Y sobre todo, una gran preocupación. En Aljubarrota influyó muchísimo el cansancio de los castellanos, que llegaron al campo de batalla por la tarde, tras una larga marcha bajo el abrasador sol de Agosto.

Hoy no hay sol abrasador que valga ya que en Ciudad del Cabo están en pleno invierno, pero la segunda parte ante Honduras no se me va de la cabeza: el desplome físico fue notabilísimo. ¿Se repetirá la historia?


domingo, 27 de junio de 2010

Txapeldunak

El equipo juvenil A del Athletic se proclamó anoche en el Francisco Bonet de Almuñécar campeón de la Copa del Rey de la categoría tras ganar por dos goles a cero al Real Madrid en la final. Culmina de esta forma el grupo dirigido por Bingen Arostegi una sensacional campaña en la que, además del título copero, consiguieron el campeonato de liga, por delante de Real Sociedad y Osasuna, y fueron semifinalistas en la Copa de Campeones de Liga, eliminados por su rival de ayer.

Hacía dieciocho años que el Athletic no ganaba el título copero de juveniles. Nos remontamos al 7 de junio de 1992, en el campo soriano de Los Pajaritos, cuando el equipo dirigido por Jose Mari Amorrortu y liderado por Julen Guerrero, quien en apenas unas semanas se incorporaría al primer equipo, venció en la tanda de penalties al Bétis. Algunos de los campeones de ayer apenas contaban con unos meses de vida cuando se disputó aquella final y muchos aún no habían nacido. Sirva como referencia que el Athletic saltó anoche al campo de Almuñecar con un jugador de dieciseis años (Ruiz de Galarreta) y dos de diecisiete recién cumplidos (Jonás y Guillermo).

Se presentaba esta final como la gran oportunidad para el Real Madrid de conseguir algo desconocido en los juveniles de ese club, el triplete (Liga, Copa de Campeones y Copa del Rey). El objetivo no parecía descabellado para los merengues cuando los antecedentes eran muy favorables a sus intereses: durante la campaña Athletic y Real Madrid se habían enfrentado tres veces y todos los partidos se habían saldado con victoria madrileña. Por si fuera poco, el entrenador madridista contaba para esta final con algún que otro jugador que había estado disputando la liga en categorías superiores con equipos como el Real Madrid C o el Castilla, algo así como que el Athletic hubiera contado con Iker Muniain o algunos refuerzos del Baskonia o del Bilbao Athletic en edad juvenil. Por tanto, los cachorrillos saltaron al campo sabiendo que eran los madridistas quienes tenían que defender su rol de grandes favoritos.

El hecho de que el Athletic hubiera perdido ya tres veces frente a su rival y, probablemente, el recuerdo de la final del año pasado, que ls rojiblancos nunca debieron perder, hizo que los chavales de Bingen Arostegi saltaran muy concentrados al campo. Desde el pitido inicial se vió al conjunto zurigorri mucho más puesto que a sus rivales, quienes parecían no haber desperatdo aún de sus ensoñaciones de favoritos. El cuadro bilbaino tenía los deberes muy bien aprendidos, sabía que debía tapar las vías de alimentación de los delanteros merengues por parte de sus medios, y obró en consecuencia. Muy aplicado en la labor defensiva, no fue, sin embargo, el Athletic un equipo aculado atrás. Con tres centrocampistas, uno más posicional (Eguaras) y dos más dinámicos (Galarreta y Peña), y la ayuda de los jugadores de las bandas, Villar y Jonxa, el conjunto zurigorri tejió una tela de araña en el centro del campo en la que moría todo intento de combinación madridista. El cortocircuito entre la media madridista y su vanguardia facilitó mucho el escaso trabajo que durante la primera mitad tuvieron los centrales rojiblancos, mientras que los laterales apenas se dejaban ver hacia arriba en un partido en el que se les requería más que guardaran el sitio que otra cosa. Así, el lateral derecho Bilbo se convirtió en uno de los mejores jugadores del Athletic al dejar totalmente inédito a la estrella blanca, Sarabia, quien tuvo que buscarse acomodo posteriormente en la otra banda, aunque tampoco allí Saborit, un jugador del que los expertos destacan más su juego de ataque que de defensa, le dio opción alguna. El mejor resumen de lo que fue el trabajo defensivo del Athletic en este primer tiempo fue el hecho de que el portero, Magunazelaia, apenas tocoó el balón, siendo la oportunidad más clara para los madridistas casi al final de este primer periodo.

En ataque el Athletic tuvo una primera fase con cierto acercamiento, sin mucho peligro, una gran efectividad a la hora de aprovechar las oportunidades y después escasa presencia arriba. Dominando como dominaban el centro del terreno de juego, los rojiblancos llegaban con cierta facilidad a las inmediaciones del area rival y, además, lo hacían con varios jugadores. Se comprueba una vez más la importancia de los “llegadores de segunda linea” en el futbol. Un disparo lejano, sin peligro de un jugador bilbaino acaba en los pies de Peña dentro del area y éste dispara sólo ante el portero marcando el primer gol. El segundo gol, a los pocos minutos, llegó con un estupendo pase entre lineas de Galarreta que recibe Villar dentro del area, elevando el balón para salvar la salida del portero. Antes de este segundo tanto le fue anulado injustamente un gol al contunto zurigorri al señalar el árbitro una falta inexistente sobre el guardameta madridista y poco después del gol de Villar, este mismo jugador hizo lucirse al cancerbero con un bonito disparo a la media vuelta. El Real Madrid tenía mucho más el balón en su poder, especialmente en zonas en las que el Athletic le dejaba que lo tuviera, pero eran los cachorrillos quienes hacían las ocasiones de peligro en una final, todo hay que decirlo, con pocas oportunidades de gol.

Tras la reanudación el guión varió ligeramente. El Athletic siguió mostrandose como un gran bloque sólido y concentrado en su tarea, pero esta presión que en el primer tiempo la estaba ejerciendo en la linea de medios, pasó a hacerla mucho más atrás. Cedió metros y se encerró en torno a su area. El conjunto blanco se hizo el dueño absoluto del balón, aunque seguía sin ofrecer una sensación real de peligro. Un par de contraataques muy peligrosos, en reacción a sendas jugadas en las que el Athletic se estiró un poco más, y un disparo lejano que se estrelló en el larguero, fueron las mejores opciones de las que dispuso el Real Mdrid a pesar de su incesante dominio. No tuvo mucha más historia esta segunda mitad, con un Athletic apoyado en un gran sistema defensivo y un Real Madrid que, impotente, veía cómo se le escapaba una final que creían estar destinada a sus vitrinas. Esta segunda parte, además, seguramente debió hacérsele muy larga a Bingen Arostegi, dada la mala experiencia de la final del año pasado. Entonces, el Athletic tenía controlado el partido, estaba a segundos de conseguir el título y un error táctico echó por tierra todo el buen trabajo anterior. Anoche, el entrenador rojiblanco no quisó sorpresas con un resultado tan favorable y, a medida que transcurrían los minutos y el cansancio y los problemas físicos se hacían presentes, fue fortificando cada vez más el sistema defensivo del equipo. Una gran victoria final que reafirma una idea que no todos acaban de comprender: los partidos de futbol se ganan aprovechando las oportunidades de gol (tener muchas y fallarlas, como muy bien sabe el primer equipo del Athletic, recuerdese la eliminación de copa frente al Rayo, no dice nada bueno de un equipo) y no se pierden defendiendo bien). El madridismo se quejaba anoche del “excesivo castigo” que su equipo había sufrido. Es probable que este año, los “mayores” con Mourinho al frente les ofrezcan muchos partidos como el que ayer jugó el Athletic y, entonces, sus opiniones cambien sustancialmente.

viernes, 25 de junio de 2010

La Roja contra la Roja...

El partido está al "rojo vivo" que se dice...

El que pierda puede irse a casa casi seguro y se pondrán "rojos" de verguenza ante sus aficionados...

Oigo el himno chileno y me acuerdo del rojo Calszely... Y de Victor Jara que, por rojo, le cortaron las manos... y me dan ganas de gritar: !Te recuerdo, Amanda!... la calle mojada...

Ahora oigo el "tchun ta chunda"... me pongo en pié, con el traje de gala de Sargento y me escuadro... Y los carrillos se me ponen rojos de la emoción, como a Santiago cuando le cogieron en el 77 con el peluquín...

Me entran de estar erecto fuertes Dolores de espalda y unas ganas terribles de chillar: No pasarán!...

Pero miro a mi alrededor y me doy cuenta que estoy viendo el partido en el Batzoki de Begoña (Barakaldo no tiene tan insigne local)... y que parece ser estoy haciendo el ridículo entre la selecta clientela... y me pongo otra vez "rojo"...

Pero enseguida me vengo "arriba", como el riojano Llorente en San Mamés, y aguanto sus miradas a lo Clint en Infierno de Cobardes, que pintó todo el pueblo de rojo, a todos los abertzales que me escudriñan con los ojos rojos de ira,...

Y unos segundos después, desafiante, les arrojo con toda La Furia que llevo dentro:

Qué!... ¿Acaso vuestro paisano Rojo no jugó también en la Roja?... ¿eh?...

El seleccionador y su asesor

Este enviado especial ha acudido como todas las mañanas al kiosko y ha adquirido los principales diarios de referencia de la prensa deportiva. Quizás influído por cierto malestar estomacal, probablemente originado por un vil garrafonazo hace dos noches en esa pintoresca fiesta local sudafricana conocida como Saint John Night, no se sentía lo suficientemente lúcido como para redactar una crónica mínimamente aceptable del partido Dinamarca - Japón. Por esta razón de fuerza mayor y en atención a sus fieles (e infieles) lectores de AMBIGÚ PRESS, ha decidido reproducir el siguiente artículo publicado hoy por el JABULANI POST y firmado por esa institución del periodismo deportivo que es PERIVALDO DE SOUZA DO NASCIMIENTO.

EL SELECCIONADOR Y SU ASESOR

Cuando Japón quedó emparejada con Dinamarca en el sorteo del mundial, cuentan quienes le conocen que Takeshi Okada, seleccionador japonés, musitaba entre dientes: "malditos occidentales, me parecen todos iguales... con sus ojos redondos..."

Han pasado muchos meses desde entonces y muchos se preguntarán cómo un seleccionador con este grado de desconocimiento de sus rivales ha podido alcanzar el éxito que supone ver a Japón en los octavos de final de la Copa del Mundo de Sudáfrica. Rascando un poco en la superficie del staff técnico nipón hallamos la respuesta en forma de un curioso asesor, de aspecto tímido, con unos papitos saludables como de niño grande y una graciosa calva reluciente: el experto en futbol internacional Yasujiro Maldinizaki.

Maldinizaki conoce prácticamente todas las ligas del mundo y, gracias a su antena parabólica, puede ver simultaneamente un partido de juveniles entre las selecciones de Burkina Fasso y Eritrea y la final de la Copa del Sultán de Brunei. No hay dato, imagen o reseña de un partido que se juegue en el planeta que se le escape al prodigioso Maldinizaki.

Okada ha manifestado en petit comité que una de las cualidades más apreciadas en Maldinizaki es su capacidad para colocar a sus jugadores en el punto exacto, hasta el punto de que cariñosamente le suele llamar "el GPS humano". Es habitual, en los entrenamientos, ver a Okada consultando a su colaborador: "¿Está bien colocado Honda?" Entonces, Maldinizaki hace una serie de cálculos mentales y corrige: "Unos metros más arriba... ah, y de paso pon a Endo unos metros más abajo".

Takeshi Okada está encantado con Maldinizaki y su espíritu crítico. Su anterior mano derecha, Yuichi Kamachomoto, acabó decepcionandole. El futuro de la selección nipona no pintaba bien por aquel entonces. Cuando le preguntaba: "Yuichi, ¿cambiarías algo del juego? ¿deberíamos introducir variaciones tácticas?", Kamachomoto siempre respondía lo mismo: "Ná, ya sabes que a mí lo que me va es el juego kamikaze".

El tandem Okada-Maldinizaki puede volar muy alto en este mundial. Los daneses ayer fueron sus últimas víctimas, ¿quienes serán las próximas?

jueves, 24 de junio de 2010

Ghana pierde... y gana

Transcurre con escaso brillo el primer mundial africano de la historia y ya va perfilandose el cuadro de octavos de final. Llegaba el grupo D a la última jornada de la primera fase con muchas posibilidades de clasificación para ghaneses, serbios y alemanes y muy pocas para Australia. Serbia, sobre el papel, jugaba con la ventaja de enfrentarse al rival más débil del grupo, pero los australianos y algunas decisiones arbitrales se encargaron de demostrar por enésima vez que en esto del futbol “no hay enemigo pequeño”.

El otro partido enfrentaba a Ghana y a Alemania. Los ghaneses representaban la excepción en la decepcionante regla del futbol africano en este campeonato. Los alemanes llegaban con más apuros de los previstos tras una apabullante victoria en la primera jornada. Dado el carácter de favorito con el que siempre comparece Alemania en cualquier competición, es obvio que ellos acudían a esta cita con mucha más presión que los africanos: caer en la primera ronda hubiera sido un rotundo fracaso y, sobre todo, hubiera planteado un serio problema de confianza en un equipo muy rejuvenecido y renovado, del que se esperan buenos resultados en las próximas campañas.

Rápidamente se mostraron sobre el campo las urgencias, las ambiciones y las estrategias de cada equipo. Mientras Alemania salió con la intención de dominar el partido desde el inicio, Ghana planteó un juego de contención y una salida veloz al contraataque. Esta idea puede inducir a engaño, puede interpretarse como que el equipo de las estrellas negras se aculó en su area y allí fortificó su portería. No fue así, la estrategia ghanesa consistió en una linea defensiva bastante adelantada y una fuerte presión en el medio del campo sobre la linea de creación alemana. Fruto de los espacios que dejaba la retaguardia africana y de ciertos desajustes defensivos iniciales, los teutones dispusieron de alguna llegada con peligro en los minutos iniciales del choque, mal definidas por sus jugadores. Con el paso de los minutos Alemania, que tenía el balón en su poder más minutos, pero que se veía incapaz de moverlo hacia zonas de peligro, cayó totalmente en las redes del combinado ghanés. Sus centrocampistas se veían impotentes para traspasar la presión de su rival, quien, no conformandose con mantener un empate que les daba la clasificación, buscaron con tanta velocidad y fuerza como desacierto la portería contraria.

Ha demostrado Ghana en esta primera fase algo de lo que han adolecido el resto de las selecciones africanas: un gran trabajo colectivo. Quizás no sea la selección con más jugadores talentosos, aunque alguno tiene, pero sin duda ha demostrado que ha llegado a Sudáfrica con la lección táctica muy bien aprendida. Ayer les faltó, sobre todo, acierto arriba y les sobró un pequeño periodo en el segundo tiempo en el que desbarataron su buena disposición táctica y dieron a Alemania la opción de marcar. El primer tiempo puede resumirse en una combinación del dominio alemán de la pelota, aunque con grandes dificultades para llegar a zonas de verdadero peligro, y una gran presión defensiva ghanesa acompañada de fulgurantes llegadas al area germana. Tan sólo la falta de puntería unas veces y de calidad otras impidieron a Ghana marcharse al descanso por delante en el marcador.

Tras el descanso, Alemania trató de imponer un ritmo más elevado a su juego. Siguieron combinando pero tratando de buscar más profundidad, de llegar más a la portería rival. A diferencia de lo que ocurrió en el primer tiempo, Ghana retrasó unos metros su linea defensiva y metió todo el equipo dentro de su campo. Siempre es dificil dilucidar si este tipo de repliegues obedecen a la presión ejercida por el equipo contrario o si es una variación táctica ordenada desde el banquillo, o simplemente una decisión que toma el equipo de forma inconsciente y que no atiende a cualquier explicación futbolística lógica. Lo cierto es que Alemania tuvo la oportunidad de llegar con más facilidad a zonas a las que en la primera mitad le costaba un mundo alcanzar con el balón jugado. De esta nueva situación llegó la oportunidad para Özil, bastante discreto hasta entonces, quien marcó un gran gol de disparo desde el borde del area.

A partir de ese momento y hasta el final del partido, Ghana recuperó su estilo inicial, con el que había maniatado a Alemania y con el que había dispuesto de unas cuantas buenas oportunidades de gol. En ese momento su clasificación peligraba por la situación en el otro partido del grupo. Los australianos iban por delante en el marcador y eso permitía aún a Ghana pasar a la siguiente ronda, pero un gol serbio, algo que llevaba minutos rondando, le dejaba fuera del mundial.

Alemania, tras el gol, jugó mucho más tranquila. Habían hecho lo más dificil, que era batir a tan correoso rival, por lo que aguantar el balon y combinarlo sin prisas era una buena opción ante la presión, otra vez adelantada, de las estrellas negras. El tramo final del partido fue realmente entretenido. Los africanos dispusieron de alguna buena oportunidad más en una noche en la que los defensas alemanes no brillaron, mientras que la subcampeona europea fue capaz de generar más jugadas de peligro que en todos los minutos anteriores a medida que los africanos iban dejando más huecos en su afán por empatar el encuentro.

Al final, Alemania ratificó su rol de favorito y consiguió la victoria que les colocaba primeros de grupo, con desagradable regalo incluído en forma de durísimo emparejamiento en octavos de final con Inglaterra. Ghana perdió el partido, pero ganó la clasificación, muy merecida, para la segunda ronda y se ganó un cruce, como mínimo, muy abierto frente a los Estados Unidos.

miércoles, 23 de junio de 2010

Héroes del Mundial - Obdulio Varela.

“Oh, Capitán, mi Capitán…” eran los versos del célebre poema de Whitman los que acudían a mi cabeza mientras avanzaba aquel documental. No es que sea especialmente dado a la poesía pero es que esos versos eran como el vino viejo, lleno de aromas, y perfecto para acompañar aquellas imágenes. Ahora casi me parece que “Regreso de héroe” no es un poema, que si lo tocas, tocas a un hombre….recio, orgulloso y noble como han de ser los hombres de bien. Como era Obdulio Varela. El capitán por antonomasia.

Y es que un capitán es cosa muy seria. No es solo un brazalete ancho en el brazo. Es mucho más, el estandarte, la bandera del equipo. El refugio y el motor del mismo. A quién mirar cuando las cosas van mal y a quién seguir lanzados en busca de la victoria. Pues bien, debo decir que si algún día nuestro admirado Almirante culmina su obra “La Gran Enciclopedia del Fútbol” junto al término “Capitán” deberá poner una foto de Obdulio Varela.

Y es que hablamos de una leyenda. Un leyenda charrúa. Cierto es que los “orientales” son muy dados a la épica futbolística, a veces, en exceso, producto de su dominio del sujeto, verbo y predicado. Pero es natural, no podemos olvidar que las únicas preocupaciones en ese país corren por el verde. Las vacas y el fútbol. Y mientras las vacas son alimento para el cuerpo el fútbol es el sustento del espíritu. Pero, esta vez, debo disculparles, creo que tienen motivos sobrados para la épica.

De hecho el fútbol, en general, como fenómeno “espiritual” es fuente de las leyendas más hermosas, casi siempre literatura alrededor de fabulosos goles, regates y pases de tiempos mitológicos. Pero, a veces, regala otro tipo de historias, aparentemente menos brillantes y, sin embargo, quizás todavía más hermosas. Sí, definitivamente, más hermosas. Como ésta.

Obdulio Varela, “oh Capitán, mi Capitán”, nació en Montevideo en 1917. De familia humilde, como tantas otras leyendas del balón, de niño casi no fue a la escuela. Pronto, con ocho años, ya trabajaba de limpiabotas, luego de vendedor ambulante de periódicos (solía decir que los periódicos solo contienen dos verdades, la fecha y el precio), después peón de albañil, y siempre asmático y mulato. Y finalmente futbolista y capitán de su equipo, sobre todo, capitán de su equipo.

Pronto el Wanderers se fijó en él, posteriormente lo adquirió, cómo no, Peñarol, equipo en el que se mantuvo hasta su retiro en 1955 y con el que ganó seis campeonatos. En 1939 debutaba con la celeste con la que fue campeón sudamericano, campeón mundial y, cómo no, capitán. Sobre todo, capitán.

¿De qué tipo de jugador estamos hablando?. Era lo que hoy denominaríamos un mediocentro o un “centre hall” como se decía entonces. Técnicamente no era apabullante, desde luego no era un mago del balón, aunque sí digno manejándolo. No era muy veloz, tampoco en exceso corpulento ni de un físico que asustara. Muy serio y eficaz tácticamente, buen distribuidor de balón pero, especialmente, sobresaliente en algo….en carácter. Era su personalidad desbordante en rectitud, en coraje , equilibrio y seguridad lo que hizo que fuera apodado como “el Negro Jefe” y que sus compañeros, tanto en sus equipos como en la selección, dijeran que “si Varela se ponía serio podía asustar al mismísimo diablo”. Vamos, un tipo de una sola pieza.


Así lo recuerda uno de sus compañeros en Peñarol…“Sin gritos, sin histerias, sabía poner en vereda a cualquiera cuando las cosas no se hacían como se debían hacer. Unas pocas palabras suyas, una mirada severa, y te dabas cuenta que tenias que poner más entrega en el partido o ser más serio en el entreno”.Los rivales lo respetaban al máximo. Todo el mundo sabía que con el “negro Jefe” no era conveniente buscarse problemas.

Su carácter hizo que fuera idolatrado por sus compañeros y afición y odiado por sus dirigentes. Claro que él tampoco les tenía cariño alguno. En una ocasión, tras una victoria sobre River Plate, los directivos de Peñarol decidieron premiar a todos los jugadores con 250 pesos…y al “negro Jefe” con 500 por ser el capitán y por congraciarse con él….”Yo jugué como todos. Si ustedes creen que merecí 500 pesos, son 500 para todos…si ellos merecieron 250, yo también”. Claro, fueron 500 pesos para todos.

En 1949 dada la lamentable situación laboral que azotaba al futbolista uruguayo, los jugadores decidieron crear un sindicato. Los clubes se negaron a reconocerlo. Los jugadores, encabezados por Varela, fueron a la huelga. No habría más fútbol hasta que se reconociese al sindicato. Los clubes imaginaron que la presión social, la falta de trabajo y el inminente mundial de 1950 acabarían pronto con la huelga. Pasaba un fin de semana tras otro sin fútbol. El hambre comenzaba a extenderse en el gremio. Cuanto peor se ponían las cosas más grande se hacía la figura de Varela, que lideró la huelga durante meses….al séptimo mes los clubes dieron su brazo a torcer.

Otra anécdota sucedida en la selección muestra el carácter de este hombre y lo que él consideraba que significaba oficiar como capitán de un equipo. En aquella convocatoria de la selección acudía por vez primera Matías González quién por alguna razón no cayó muy bien en el grupo. Cuando Varela entró en el bar del hotel donde estaban concentrados vio a Matías bebiendo solo en la barra del bar mientras un amplio grupo de jugadores bromeaba, reía y bebía sentados en una mesa…..Varela se dirigió a la barra, con una mano tomó del brazo a Matías y con la otra una silla vacía…se dirigió a la mesa….apartó a dos de los muchachos…situó en medio la silla e hizo ademán a Matías para que se sentara mientras decía a todo el grupo…”los uruguayos beben todos juntos”. ¡Oh capitán, mi capitán!.

Con todo, el episodio que marcó para siempre su carrera se desarrollo en el mundial de 1950, con su selección, en la que hizo mítica la camiseta con el número 5. En ese mundial protagonizó, seguramente, una de las más grandes hazañas que se haya visto en un campo de fútbol. El famoso “Maracanazo”.

Aquel Mundial estaba diseñado para la segura victoria de Brasil. Tras la primera ronda se siguió jugando con formato de liguilla para evitar que un mal día de la canarinha estropease la fiesta. Aquella selección brasileña era todo un lujo, con Ademir, el rey del gol, la magia de Zizinho y Jair o el inexpugnable Barbosa. Una formación llamada “la diagonal” que dejaba maravillados a todos los que la veían en acción.

¡Y vaya si cumplieron el pronóstico!. Para la resolución del campeonato habían quedado Brasil, Suecia, España y Uruguay. El 9 de Julio Brasil aplasta a Suecia por 7-1. Ese mismo día Uruguay sufre para empatar a dos contra España, con gol de Obdulio. El 16 de Julio Brasil apaliza a España, 6-1, y los uruguayos consiguen a poco de finalizar el partido contra Suecia dar la vuelta a un 1-2 y vencer por un angustioso 3-2 y de forma, dicen, totalmente inmerecida.

Así se llega al encuentro cumbre, el Brasil-Uruguay en el que con un simple empate esa Brasil, soberbia, espectacular, inalcanzable, se proclamaría, por vez primera, campeona del mundo. Ya en los partidos anteriores la presión de la grada había sido bestial. Skoglund, jugador sueco, recordando el partido contra Brasil comenta: “Cada vez que tocaba el balón explotaban petardos a mi alrededor. Era como jugar en un campo minado. Imposible siquiera pensar en ganar”.


Con eso presente puedo imaginar el ambiente brutal que se respiraba aquel día en Maracaná. El país entero se paralizó. La prensa habían anunciado el partido como la primera victoria mundial de Brasil y las camisetas que lo conmemoraban inundaban el estadio. El estadio estaba repleto, hasta la bandera, desde tempranas horas de la mañana. Alegría, magia, esplendor, confianza absoluta. Doscientos mil brasileños os contemplan.

De mientras en el vestuario charrúa también pasan cosas. Cosas desagradables. Mientras Varela y los muchachos se preparaban , con mimo, el uniforme y se calzaban las botas, uno de los dirigentes de la federación uruguaya entró al vestuario para transmitirles un mensaje oficial “perdiendo por menos de cuatro goles se salva el honor”.

Aquello fue como una puñalada. Varela le dirigió una mirada glacial. Escupió. Se volvió hacia los suyos para decir “Muchachos, si les tenemos miedo nos caminan por arriba. ¡Vamos a ganar este partido!”. Luego ya en el túnel de vestuarios, desde donde se intuía la caldera que les esperaba fuera y al ver a sus jóvenes compañeros acongojados se volvió , de nuevo, hacia ellos “No penséis en toda esa gente. No miréis arriba, el partido se juega abajo y si les ganamos no va a pasar nada. Nunca pasa nada. Somos once contra once y el partido se gana poniendo los huevos en la punta de las botas”. Salieron al campo al paso lento marcado por Varela, sin carreras, caminando despacio como diciendo….”somos uruguayos…aquí estamos…y nos importáis un bledo”.

El efecto que esa intervención de Varela tuvo en sus compañeros se evidencia en los comentarios realizados años después por algunos de ellos. Julio Pérez, recordaba: “Los cronistas se dejaban impresionar por las goleadas de Brasil, pero no se daban cuenta que los rivales se achicaban. Y no era para menos. La tribuna, la multitud, y todas esas cosas que pesaron en el ánimo de los españoles y los suecos, permitieron las goleadas. Pero Obdulio nos enseñó que eso con nosotros no camina. Que nuestro equipo jugaba bien y estaba integrado por hombres”. Oscar Omaz Míguez también rememora: “El mensaje de nuestro capitán era claro….¿Por qué nos iban a ganar?, ¿quiénes eran?. No temíamos ni a Dios ni al Diablo. Si Máspoli hubiese jugado de delantero, hacía dos goles, y si yo hubiera ido al arco, atajaba dos penales”. ¡Oh Capitán , mi Capitán!.

Por supuesto, nunca he visto el partido completo, nunca nada más allá de algunas imágenes sueltas en blanco y negro, y sin embargo creo que soy capaz de cerrar mis ojos e imaginarme cómo se desarrolló el que algunos consideran mejor encuentro de la historia de los Mundiales.
Nada más iniciarse el partido, Brasil se lanzó en tromba sobre el área rival. Como hacían siempre. Las ocasiones se sucedían una tras otra. Varela achicaba balones como podía intentando no perder de vista a Ademir. Así durante 45 minutos eternos. Se llegó al descanso con un increíble empate a cero. Con todo la fiesta en la grada continuaba, al fin y al cabo con el empate Brasil era campeón.

El segundo tiempo comenzó igual que el primero. Brasil atacando como posesos. Pero esta vez Uruguay apenas pudo aguantar dos minutos. El gol de Friaca convirtió no ya Maracaná sino todo Brasil en una especie de manicomio. El país entero enloqueció. Pero no Varela.

Aquel hombre tallado en piedra estaba a punto de entrar en los libros de historia. Cuando vio el balón en las redes suspiró, clavo sus ojos pardos en aquella grada enfervorizada y supo lo que tenía que hacer. Pensó que “estos tigres nos devoran si les servimos el bocado demasiado rápido”. Irguió su torso cuadrado y caminó despacio hacia su portería, desafiante, sin una palabra para nadie. Recorrió los treinta metros que lo separaban de la pelota a paso lento, firme. Llegó hasta ella, la tomó en sus manos y la colocó bajo su axila derecha. De esta forma y con el mismo andar de antes se dirigió hacia el linier a reclamarle algo en un, para el juez de línea, incomprensible castellano.


El mundo entero tuvo que esperarle varios minutos mientras la grada, confundida con lo que pasaba, comenzaba a dejar el griterío y se iba imponiendo, poco a poco, un expectante silencio.

El árbitro inglés amenazo con expulsarle y él pidió un traductor. Aquella imposible y tediosa conversación se alargó hasta que con el estadio en silencio Varela entendió que el objetivo estaba logrado. Enfriar los ánimos de jugadores y público, poner distancia entre el gol y la reanudación para que aquel ambiente infernal no terminara de devorar a su equipo. El día en el que el imponente uruguayo con el 5 a la espalda silenció a doscientos mil fanáticos brasileños.

Así lo recuerda uno de sus compañeros: “Cuando se nos venía encima la avalancha él supo enfriar el partido. Luego, antes de sacar de centro, nos miró y nos dijo. “Seguidme. Ahora vamos a ganarles a estos “japoneses””. Sin arengas, a puro coraje nos había empujado contra viento y marea. Fue entonces cuando entendí que podíamos ganar ese partido. Sin el “negro Jefe” aquella máquina de jugar a fútbol que era Brasil nos hubiera pasado por encima.”

A partir de ese momento el partido cambió radicalmente. Uruguay fue un aluvión. Brasil desconcertado. Varela empujaba desde el medio de la cancha, como un mariscal, ordenando a sus tropas. Parecía que la pelota era de él, y cuando no la tenía, era porque la había prestado un ratito a unos de sus compañeros.

En el minuto 17 de la segunda parte Schiaffino logró el empate. El miedo se instaló en la canarinha.....no parecían ni sombra de lo que habían sido….Máspoli, el arquero charrúa lo recuerda así…”ellos no respondían…en una jugada un jugador brasileño cayó…le ayudé a levantarse y le palmeé la cara porque nos conocíamos todos…..!estaba helado!...!pálido!....”


Las camisetas celestes estaban en todas partes y el gigante ya no les infundía el menor miedo. Faltaban nueve minutos cuando Ghiggia marcó el tanto de la victoria charrúa. Estalló el silencio en Maracaná, el más estrepitoso silencio de la historia del fútbol. El mundo del balón no podía creer que el coloso muriera así, en su propia casa.

El final del partido significó la mayor congoja colectiva que jamás haya provocado un hecho deportivo. Y un desastre organizativo. Cuando Jules Rimet fue a entregar la copa y pronunciar su discurso no estaba nada preparado….no habia ni guardia de honor, ni himno, ni podio, ni discurso, ni entrega solemne…..solo un silencio desolador dominaba el estadio. La policía lloraba. Rimet entregó la Copa a Varela casi a escondidas, le dio la mano y salió pitando sin decirle una sola palabra de felicitación.

Aquel día Brasil se vistió de luto. Algunos hinchas locales optaron por el suicidio. Otros prometieron no volver a un estadio de fútbol. El seleccionador brasileño Flavio Costa pasó 24h. escondido en Maracaná. Finalmente pudo salir vestido de mujer. La selección tardó dos años en volver a jugar y cambió su uniforme por el que ahora conocemos tan bien. Un diario tituló al día siguiente “Nuestro Hiroshima”. Ahora uno entiende el nudo en la garganta que se le hizo a toda Brasil en la semifinal de Mexico-70 cuando Uruguay se adelantó en el marcador. La presencia de los fantasmas que nunca nos abandonan.

Y Varela? ¿Cómo lo celebró Varela?. La embajada uruguaya y la federación organizaron un gran festejo aquella noche. Varela les dijo a los muchachos…. “Es una reunión llena de hipócritas y figurantes. Yo no voy”. Prefirió salir a deambular por las calles, de bar en bar, bebiendo con los vencidos. Le reconocieron, y para su sorpresa, en lugar de tener problemas le felicitaron y muchos de ellos se quedaron bebiendo con él hasta el amanecer. Cuando al dia siguiente los periodistas quisieron saber su opinión sobre el partido, Varela fue claro: “Ganamos porque ganamos, nada más. Brasil es una máquina: nos llenaron a pelotazos. Métaselo en la cabeza: jugamos cien veces y sólo ganamos ésta.”

En recompensa por la hazaña, los dirigentes del fútbol uruguayo se otorgaron a sí mismos medallas de oro. A los jugadores les dieron algún dinerillo. Asi es la vida, pero, francamente, es triste que uno de los protagonista de esta leyenda, quizás el más importante, años más tarde tuviera que confesar: “Si volviese a jugar esa final prefería perderla. Parecía que los dirigentes eran quienes habían ganado el trofeo". Y es que hay cosas que nunca cambian.

Obdulio Varela murió el 2 de Agosto de 1996 con la misma humildad con la que vivió toda su vida. Eso sí, como siempre, todo Uruguay lloró su muerte.

Asi que deben resonar, de nuevo, los versos de Whitman…

¡Oh Capitán! ¡Mi capitán! Nuestro espantoso viaje ha concluido
El barco ha enfrentado cada tormenta, el premio que buscamos fue ganado
El puerto está cerca, las campanas oigo, toda la gente regocijada
Mientras los ojos siguen la firme quilla de la severa y osada nave
Pero ¡oh corazón! ¡Corazón! ¡Corazón!. Oh las sangrantes gotas rojas,
Cuando en la cubierta yace mi Capitán. Caído, frío y muerto.
Oh Capitán! ¡Mi capitán! Levántate y escucha las campanas
Levántate, por ti se ha arriado la bandera, por ti trinan los clarines
Por ti ramos y coronas con cintas por ti una multitud en las riberas
Por ti ellos claman, el oscilante gentío, sus ansiosos rostros a ti se vuelven
¡Arriba mi Capitán!

Sus últimos recuerdos, las botas de Maracaná y su camiseta con el número 5, se guardan en la Federación Uruguaya. Hasta eso se quedaron los dirigentes.



PS: Y un último comentario. No soy mucho de ídolos ni mitos de carne y hueso. Pero en todo caso estoy convencido que uno no elige a sus modelos, a sus ídolos. Son ellos los que nos eligen. Quizás si hubiera dependido de mi, de tener ídolos, habría escogido alguno de esos rutilantes magos del balón….pero en mi caso si tuviera modelo alguno debo reconocer que me ha elegido Obdulio Varela, el Negro Jefe. Y creo, de verdad, que he tenido muchísima suerte.

Y Jaburu qué opina de esto?...

El Consejo de Gobierno, a propuesta de la consejera de Cultura, ha aprobado el Decreto tiene por objeto establecer el régimen de los clubes deportivos y agrupaciones deportivas domiciliados en Euskadi. Con esta disposición se pretende desarrollar el nuevo modelo asociativo deportivo diseñado en la Ley 14/1998, de 11 de junio, del Deporte del País Vasco, y, al mismo tiempo, dar respuesta a los diversos problemas suscitados con la aplicación del Decreto vigente hasta la fecha.

Se denomina clubes deportivos las asociaciones privadas, con personalidad jurídica y sin ánimo de lucro, integradas por personas físicas o jurídicas, cuyo objeto sea el fomento y la práctica de una o varias modalidades deportivas, participen o no en competiciones deportivas. Por otra parte, son agrupaciones deportivas las secciones que se constituyen en el seno de entidades, públicas o privadas, con el objeto del fomento y la práctica de una o varias modalidades deportivas, participen o no en competiciones deportivas.

Una de las novedades importantes del Decreto es la simplificación de la regulación de las entidades deportivas que, por ello, ven conformado su régimen jurídico sobre la base del régimen asociativo general. De este modo, las entidades deportivas reguladas en este Decreto se regirán en todas las cuestiones relativas a la constitución, organización, funcionamiento, extinción y cuestiones análogas por las normas del Decreto y demás disposiciones de desarrollo de la Ley del Deporte del País Vasco. Tales entidades se regirán, en lo no dispuesto expresamente en dichas disposiciones deportivas, por la normativa general en materia de asociaciones. Además, en materia de régimen orgánico les resultarán de aplicación preferente sus propios estatutos y reglamentos debidamente aprobados por sus órganos competentes.

El Decreto pretende ser absolutamente respetuoso con la naturaleza asociativa privada de los clubes deportivos y, así, elimina numerosos apuntes intervencionistas, que se encuentran dispersos en la norma anterior, carentes de justificación. Además de constituir una dudosa limitación del derecho constitucional de asociación, dichos apuntes intervencionistas han acabado desnaturalizando parcialmente el carácter genuinamente privado del asociacionismo deportivo de primer grado.

Por otra parte, la nueva disposición ya no recoge la distinción artificiosa, y generadora de algunos problemas, entre los clubes deportivos y las agrupaciones deportivas con personalidad jurídica. La diferenciación sustancial entre ambas entidades deportivas, dejando de lado aspectos formales de su constitución o de su régimen jurídico, residía en la participación habitual o no en competiciones oficiales. A pesar de esa diferenciación legal, la realidad ha demostrado que numerosas agrupaciones deportivas han participado habitualmente en competiciones oficiales y, por el contrario, numerosos clubes deportivos nunca han participado en competiciones oficiales en las modalidades contempladas en su objeto social. Por ello, la opción contemplada en este Decreto consiste en unificar ambas figuras de manera que los clubes deportivos se caracterizan por el fomento o la práctica de una o varias modalidades deportivas, participen o no habitualmente en competiciones oficiales.

El Decreto regula, así mismo, una materia que a pesar de ser trascendental, se encuentra silenciada en la norma vigente y en la mayor parte de disposiciones autonómicas: la responsabilidad del personal directivo de los clubes deportivos. Este silencio ha abierto el camino a una situación de permanente incertidumbre jurídica y, por ello, la presente disposición opta por clarificar dicho régimen de responsabilidad. Así, los socios y socias de los clubes deportivos no responden personalmente de las deudas de los citados clubes, pero las y los miembros o titulares de los órganos de gobierno, administración y representación de los clubes y las demás personas que obren en su nombre y representación responderán ante dichos clubes, ante sus socios y socias, y ante terceras personas y entidades, por los daños causados y las deudas contraídas por actos dolosos, culposos y negligentes.

Por último, otra de las mayores aportaciones que se realizan en este Decreto es la atribución de una mayor libertad de autoorganización a los clubes en materia electoral. La realidad durante los años de vigencia del Decreto ahora derogado, es que muy pocos clubes de los más de 4.000 inscritos en el Registro de Entidades Deportivas del País Vasco han cumplido la normativa vigente en materia electoral. Por todo ello, en consonancia con la eliminación de determinados apuntes intervencionistas, el Decreto reduce el régimen electoral a una mínima expresión de modo que deberán ser las normas estatutarias o reglamentarias de los clubes las que regulen su régimen electoral.


P.S.: La Dirección de este local hasta que no se pronuncie nuestro cliente Jaburu no hará ningún comentario al respecto sobre la bonanza de este Decretazo... En ningún artículo parece que se explicite "dolo" por quemar a un par de compromisarios...

martes, 22 de junio de 2010

Cómo sobrellevar el penoso Mundial: La ruta del Patio Andaluz...

Dice el refranero antiguo que las penas con pan son menos... Y siguiendo esta máxima, y como tenía poco trabajo hoy en la barra, -tan sólo un cliente trajeado que me ha pedido un Marianito Rosso-, he rescatado del fondo del Almacén del local esta entrada antigua, publicada hará dos años, para que sepais que es lo que yo hago por las noches cuando hay partido a las 8 y media... Pues bien, en vez de estar en casa como un frikie delante de la caja tonta, yo me veo este tostón de Mundial haciendo esta ruta variopinta gastronómica por una zona clásica de la localidad fabril, entre crianzas, albariños, ruedas o espumosos fríos, según tercie, y siempre acompañados con el consiguiente pincho moruno,... pulpo con cachelos,... lonchas de jamón,... corteza de cerdo,... calamares... montadito... o lo que mejor apetezca llevarse a la panza en ese momento según el día y la hora.... así, de esta guisa, apenas veo secuencias de este paupérrimo y ruidoso Mundial, y evito lesiones irreversibles en mi, ya de por sí, apoptósico paleocortex y mi debilitado oído...

La denominaré "la ruta del Patio Andaluz":

En dicha ruta caben todo tipo de actividades gastro-lúdicas relacionadas con las distintas cocinas regionales hispánicas. Desde bares con atractiva barra donde degustar sabrosos pintxos hasta terrazas con estética a patio flamenco y todo ello con un precio de "escándalo", que diría el Gran Rapha, para los que poteais por Bilbo o la margen derecha.

Recomiendo hacer el recorrido por la tarde-noche, mejor un viernes o un sábado, y venir en metro bajandose en la parada Barakaldo-Fueros para evitar "soplar, que bastante ya lo hareis si visitais todos los sitios recomendados. Esta época veraniega es ideal para hacerla. Si escogeis el coche, os recomiendo que aparqueis en el parking de los Juzgados de Barakaldo, sito por detrás de los mismos, evitando así entrar en el caótico centro del pueblo.

El punto de partida y de retirada se ubica en la archiconocida Plaza Bide Onera, a escasos 20 metros del metro y del parking, y conocida antiguamente como Plaza del Monumento puesto que había un monolito en homenaje a los Caídos que no se "rindieron"... jajaja..., y en la que ahora se encuentran unas palmeras mediterráneas que maridan, mas bien chirrian, con las tres chimeneas de hierro que se yerguen cielo arriba simbolizando las de los antiguos Altos Hornos, y que son obra de Agustín Ibarrola (véase foto).

Desde allí, -el orden del recorrido es opcional, según lo que te guste- debemos subir por la calle Landaburu, en dirección a Arrandi, unos 150 metros desde la Plaza hasta llegar a una pequeña entrada que da a una Plazoleta que se encuentra metida entre las casas y que, aunque se llama Plaza Federico García Lorca, es conocida por todos los de la zona como "el Patio Andaluz", ya que en ella se encuentra el Centro Regional que da el nombre a la ruta, y también porque su decoración y sus características de cerramiento entre edificios remeda a esos lugares de encuentro tan típicos del sur. En verano, el patio suele estar completamente abarrotado de sillas de terraza donde se aglomera la gente del Barrio de Rontegui y la Plaza se pone un poco "petá" los fines de semana si acompaña el buen tiempo.

Debemos entrar en la Plaza y atravesarla hasta llegar al primer lugar de peregrinación: El Bar "Costa del Sol", situado en el otro extremo del Patio y al que se llega tras subir unas escasas escaleras que hay en la Plazoleta. Allí comenzaremos nuestra ronda pidiendo el famoso pincho moruno, confeccionado con carne de cerdo adobada y hecha a la brasa de carbón vegetal.

He probado muchos pinchos: de cordero, de cerdo, etc, pero os puedo asegurar que ninguno he comido tan conseguido como éste. Yo me suelo pedir siempre un par de ellos y picantes.

A continuación, os recomiendo andar unos 50 metros hasta llegar al Bar Landa, donde Cristobal y Katty hacen una pareja singular y entrañable, aunque aparentemente siempre están riñendo,... si vais un grupo de 4-6 personas pedir un plato de jamón y otro de un insólito queso curado de un sabor intensísimo... toda una exquisitez!. Os quedaréis asombrados de la calidad de ambos productos a un precio casi irrisorio. Si os parece mucha ración, podeis tomar la opción de pedir un "bocadillito" de jamón o de queso. El jamón para el bocadillito te lo parten a "máquina" en ese mismo momento, lo que hace que esté en su punto perfecto de aroma y jugosidad. Por las tardes, suelen hacer unas tortillas estupendas. Y si por casualidad le ha dado a Cristobal por cocinar callos con morros u otra exquisitez de las suyas, no dudeis en pedir una cazuelita. Este peculiar bar oferta también una barra de pinchos "clásicos" buenísimos, pero sólo a las mañanas, y especialmente se hace variada y atractiva la barra los sábados y domingos, auqnue el local se abarrota en demasía, lo que aveces provoca una espera larga hasta que te sirven. Y repito, el precio en todo es aquí ajustadísimo.


Enfrente del Bar Costa del Sol, en la calle Castilla y León, los amantes del champiñón a la plancha con una salsa de ajillo, aceite y limón tienen visita obligada al Bar Los Hermanos, aunque sólo enciende la plancha los sábados y domingo mediodía. Muy cerca de este santuario del agaricus de cultivo, en "el patio de arriba", se encuentra la Cafetería Al Andalus que cuenta con una terraza muy tranquila a las mañanas, ideal para tomarse un Rueda frío, el mas rico ´de la zona para mi gusto, acompañado con algún pintxito (recomiendo el de bacalao crudo al ajillo o el de morro empanado). La terraza se vuelve muy bulliciosa a las tardes-noche si el buen tiempo acompaña. A mí lo que mas me gusta de este lugar a la tarde, -decorado a la manera andaluza y donde también asan buenos pollos y codillos de cerdo a las noches los fines de semana, es el bocadito de presa ibérica con loncha de jamón ibérico, denominado "montadito", aunque peca algo de grasiento.

Continuando con los encantos de este maravilloso animal, para los que les gusten las cortezas de cerdo churruscantes, avisarles que no pueden dejar de visitar otro establecimiento de la misma zona en la Calle Bizkaia, de nombre asiático, aunque el sushi precisamente no sea su fuerte: El Bar Tibet, en el que Juan, su dueño, nos obsequia a diario con una fritura singular de la careta de gorrino singular, de una textura tan churruscante que es santo y seña en Barakaldo. Hay que procurar rendir visita antes de las 9 y media de la noche, porque se suele acabar muy pronto el codiciado producto.

Justo en la acera de enfrente está el Bar Nervión, también con una buena barra de pinchos entre los que destacan el champi al ajillo y el bacalao con pimientos. También cuentan con variados y selectos "caldos", y especialmente la barra se pone irresistible "a orillas" del Nervión al mediodía los fines de semana.
Los amigos del "pulpo a feira" tienen un buen santuario, a escasos metros del Landa, en el Bar A Nosa Terra, en la calle Landaburu, pulpería que regentó tantos años Santi y su mujer y ahora continúa con ella su hija. Los "cachelos" (patatas cocidas ) suelen estar buenísmos, así que os recomiendo pedir una de pulpo y aparte una de patatas, para quedar bien, aunque se puede solicitar una ración combinada. El ribeiro blanco fresco en taza está logrado, aunque no pueda competir con el albariño que ofrecen en copa. También es una propuesta interesante en este concurrido local de cocina gallega el jamón asado y el lacón. En temporada tienen pimientos del padrón, aunque algunos suelen picar como demonios.

Otra opción digna para comer el cefalópodo a feira si el A Nosa Terra está cerrado (los domingos tarde) se encuentra, un poco mas abajo de la misma calle, en el Bar A Coruña, sita en dirección Landaburu, de vuelta a la Plaza de las Chimeneas y disfrutarás, a la par que te metes un tentáculo en la boca, si hay partido del Madrid del ambiente galaico-merengue-fabril tan arraigado en nuestra anteiglesia... jajaja.

Un poco mas abajo del A Coruña, a escasos 20 metros, acaban de abrir esta semana una mejillonería "La Batea", que aún no he visitado, y que pinta muy bien, donde los amantes del marisco pueden tener un santuario a precio módico.

Me dejo algunos en el tintero, como la Cafetería Jokin, en Arrandi, lugar ideal para tomar combinados preparados por el dueño o su hermano, un gran profesional y gran athleticzale. Estupendo el vermouth rojo o blanco que preparan. O si prefieres degustar como aperitivo los mejores calamares rebozados que yo he comido a la mañana no puedes marchar sin probarlos en el Bar Baxter, sito en el mismo interior del Patio Andaluz, incluso a la tarde los preparan, y puedes comerlos hasta en terraza si se quiere. Eso sí, siempre en fin de semana. También te puedes tomar allí ricamente sentado un pincho moruno cogido del Costa del Sol, ya que los dueños son grandes amigos y hay confianza.

Creo que hay mas que suficientes "motivos" para disfrutar de una agradable velada vespertina barakaldesa en verano. Y todo en apenas 500 metros cuadrados...

Y ya de retirada, para los más resistentes, camino del punto de partida y del Metro, podemos hacer una última escala en dos nuevos locales sitos en la Plaza Bide-Onera, y que cuentan también con una surtida barra de tapas, incluso calientes, aunque son mas bien pintxos "cool" o de diseño (a mi, personalmente, me van mas los de los otros bares, mas clásicos). Son El Sikera y el Tempus Fugit, cafeterías que están ahora de moda, habiendo cogido mucho auge especialmente por la noche, ya que en ambos se pueden tomar ortodoxos preparados agitados, no revueltos, - como mandan los cánones de la hostelería-. El Tempus Fugit dispone además de una magnífica terraza en medio la Plaza de las Chimeneas, ideal para las noches barakaldesas calurosas.

En fin, amigos, cuando queráis, que sepais me teneis a vuestra disposición para acompañaros, si así lo deseais, en esta atractiva ruta que espero que no os defraude.

Y como colofón a este primer apunte de nuestro nuevo rincón gastronómico, me gustaría que comentárais qué restaurante de Bilbao o alrededores para vosotros pone el mejor txuletón a la brasa.

Nos vemos por los bares...

lunes, 21 de junio de 2010

Previa España-Honduras

¡Qué vagos están los corresponsales!

O están con resaca, o han ligado.

O se están haciendo un sandwich, que con Kaiser de por medio, todo es posible.

Bueno. Hoy juega España contra Honduras. Una final. En el sentido de que el fiasco frente a Suiza no da lugar al error.

Tampoco lo hay para la confianza. Si algo está demostrando este Mundial, es que no hay enemigo grande, y tampoco España tiene por que serlo frente a Honduras.

Del Bosque, por lo que dice la prensa. es inasequible al desaliento. Repite el centro del campo con Busquets y Alonso, y los cambios son Torres y Navas por Iniesta y Silva. Más de lo visto en la segunda parte contra Suiza.

Contra Honduras puede funcionar. Y eso reafirmaría las convicciones para el partido decisivo frente a Chile.

Pero a mí me da la sensación de que Torres no está en forma.

A ver qué pasa. De momento Maynor Figueroa, defensa hondureño, avisa de que "el fútbol de hoy no sólo pasa por la posesión"


Futbol filosófico

Desde la dirección de este antro se están vertiendo duras acusaciones sobre la falta de actividad y absentismo de los enviados especiales a Sudáfrica. Tenga en cuenta la patronal ultramontana del tugurio que de esto ya está informado Toxo y en cuanto le venga bien, después de las vacaciones, por supuesto, le va a caer a este ambigú encima una huelga general de la órdiga.

Además de condenables, dichas acusaciones son falsas. Es cierto que este corresponsal ha abandonado temporalmente el territorio sudafricano, pero única y exclusivamente ha sido para informar sobre un campeonato paralelo de futbol filósofico y no, como maliciosamente se ha dejado entrever, para intentar ligar con holandeses, danesas u otros especímenes rubicundos que se puedan encontrar por Cape Town.

Aquí están las imágenes que prueban lo que estoy afirmando.

Final Juvenil: Athletic Club - Real Madrid

Telegráficamente, que tengo que dejaros.

Los cachorros han ganado 1-2 el partido de vuelta de semifinales en Valencia, y la final la jugaran contra el Real Madrid.

Segunda final consecutiva. Creo que debemos felicitarnos y felicitar a los responsables de este logro.

El Correo dicit:

Como había anunciado el técnico en los días previos al encuentro, el Athletic olvidó el gol de ventaja que había recaudado en Bilbao (2-1). Nada de eso. Había que marcar. «Vamos a salir a ganar», advirtió Arostegi. Y sus pupilos cumplieron esa palabra. Con una alineación muy similar a la del choque de ida -sólo entró Bilbo por Jon García-, el conjunto visitante acertó primero ante el marco rival, con un juego basado en la velocidad. Fue Jonxa, en el minuto 28, quien adelantó a los vizcaínos.

El Athletic acariciaba la final, el pase. Ya tenían más de tres cuartos de billete para viajar a Almuñécar. Aunque debían mantener las precauciones, porque los valencianos han protagonizado varias 'machadas' a lo largo de la competición con espectaculares partidos de vuelta que les sirvieron para eliminar a domicilio tanto a Barcelona y Betis. Pero no. Ayer no fue su día, a pesar de que Vicente Mir efectuó varios cambios antes del descanso para intentar voltear el marcador.

El segundo, de penalti

Las sustituciones carecieron de efecto. Nada. El Athletic, en cambio, se sentía cómodo sobre el Mini Estadi de Paterna. A lo suyo, se encontró con un penalti a favor en el minuto 57. Saborit se encargó de introducirlo en la red 'ché'. Sólo les quedaba la épica: el Valencia debía anotar cuatro goles si quería pasar de ronda, si deseaba llegar a la final. Pero Magunazelaia defendió el marco como un jabato, y sólo Roger pudo superarle cuando ya no daba tiempo para nada más que maquillar el resultado.

Con el pitido final, estalló la alegría rojiblanca, un equipo con hombres como Ramalho y Aurtenetxe, futbolistas que ya se han ejercitado a las órdenes de Joaquín Caparrós, e incluso el segundo jugó en la Liga Europa contra el Werder Bremen en San Mamés. Tras disfrutar del triunfo, los de Arostegi ya se han puesto a pensar en el Madrid, que se llevó la Copa de Campeones hace poco más de un mes, tras superar en semifinales a los bilbaínos (2-1). En Almuñécar, el Athletic espera que sea distinto.


Ahora solo falta ganarla y sacarnos la espina de la final que perdimos -de forma increíble, en mi opinión- el año pasado.

domingo, 20 de junio de 2010

Los leones domados

La historia de los campeonatos mundiales de futbol se ha regido por una curiosa norma no escrita según la cual el equipo vencedor pertenece al mismo continente que el del país organizador. Esta pauta sólo se ha roto en dos ocasiones y en ambas fue campeona Brasil: en 1958, en Suecia, y en 2002, en Corea del Sur / Japón. En todas las demás fases finales disputadas, los europeos han ganado en Europa y los americanos en América. En este primer mundial disputado en tierras africanas es más que probable que la tradición vuelva a romperse y que una selección americana (más bien sudamericana) o una selección europea se proclamen campeones del torneo.

Más allá del resultado final, la primera cita mundialista en África, además de muchas otras connotaciones sociales, económicas y políticas, plantea la cuestión de si será éste el mundial del futbol africano. Desde hace años los futbolistas africanos se encuentran presentes en las mejores ligas mundiales y en algunos casos se han erigido en los auténticos líderes de equipos de primerísima linea. Sus selecciones, sin embargo, no acababan de convencer en las competiciones mundiales. Es por esta razón que el campeonato sudafricano tiene uno de sus alicientes en observar si alguna de los combinados del continente es capaz de dar un salto cualitativo en el escalafón internacional.

Los comienzos de la Copa del Mundo de Sudáfrica están siendo desiguales para las selecciones africanas y aún es pronto para ver su verdadera dimensión. Por esas paradojas que tiene el futbol, la que parece ser la selección más potente del continente, Egipto, cayó eliminada en la fase de clasificación, mientras que sí están presentes otras selecciones cuyo declive futbolístico es notorio.

El anfitrión, Sudáfrica, está ofreciendo una discreta participación. No es sencillo para una selección con escasos mimbres hacerlo bien en casa, superar la presión y obtener resultados, pero lo cierto es que no se esperaba más de ella. Hasta ahora, con su clasificación para la siguiente fase prácticamente imposible, su papel se ha correspondido más o menos al nivel que tiene. Algo similar a lo que está haciendo Argelia, que está cumpliendo con el rol, mostrando un juego aproximado al del potencial que su plantilla posee. Su mal comienzo ha sido enmendado en parte con su empate frente a los ingleses, lo cual les ha dado ciertas opciones en un grupo muy igualado.

La selección africana que mejores resultados ha cosechado después de disputarse las dos primeras jornadas ha sido la de Ghana, que encabeza su grupo con un a victoria y un empate. Sin su gran figura, Essien, quien no ha podido llegar al torneo por una lesión, los ghaneses están cumpliendo en cuanto a los resultados aunque su juego no alberga demasiadas esperanzas de que su trayectoria se alargue mucho en esta Copa del Mundo. El próximo partido frente a una de las favoritas, Alemania, además de dirimir la clasificación final del grupo, servirá para ver el nivel real del equipo ghanés.

Hay dos selecciones que, a falta de la última jornada de esta fase inicial, ya se han ganado el calificativo de decepcionantes: Nigeria y Camerún. Dos selecciones con una larga trayectoria en los campeonatos mundiales y que, en ocasiones, han parecido que iban a protagonizar el gran salto de calidad del futbol africano. A Nigeria aún le queda una última oportunidad para clasificarse en la última jornada, si bien su nivel de juego está siendo tan pobre que se antoja muy complicado que vaya a llegar muy lejos en la cita sudafricana. No obstante, es muy aventurado pronosticar cualquier resultado en campeonatos con tanta igualdad, en los que no destaca nadie y el nivel se iguala mucho a la baja. Quién sabe, quizás Nigeria, al estilo más tradicional de Italia, supere por los pelos la primera fase y se haga fuerte en los partidos siguientes, pero, no nos engañemos, como dice la sabiduría popular: “donde no hay mata, no hay patata”.

Camerún protagonizó ayer uno de los grandes fiascos del campeonato, al caer ante Dinamarca y dilapidar cualquier opción de clasificación. Aún contando con figuras de la talla del interista Etoo o del gunner Song y un puñado de buenos jugadores de complemento, su futbol es un compendio de lo que no debe ser el juego de equipo. Once señores campando a su aire por el terreno de juego, dinámicos y verticales, sí, pero con unas carencias estructurales en la defensa y en el medio del campo atroces. No es de extrañar que el viejo zorro danés Morten Olsen les batiera tácticamente de la forma que lo hizo: con orden defensivo y salidas fulgurantes buscando los huecos que los cameruneses dejaban atrás. Un intercambio de golpes desequilibrado, en el que los leones indomables trataban de hacer daño con sus poco afilados colmillos mentras que los vikingos lo hacían de verdad. Y es que los problemas de Camerún no empezaron en Sudáfrica. Al mundial acudieron planteando muchas dudas respecto a su juego y en una espiral de declaraciones cruzadas entre una figura legendaria, Roger Milla, y su actual estrella, Etoo, que estuvo a punto de comprometer la participación de éste en el torneo.

La pregunta que cabe hacerse es por qué algunas de estas selecciones, como es el caso de Camerún, están ofreciendo un nivel tan bajo, especialmente si tenemos en cuenta que cuentan con algunas individualidades de las que podríamos esperar mejores prestaciones. Se podría especular con mil argumentos sobre el por qué el futbol africano no acaba de despegar, teniendo como tiene buenos jugadores en las diferentes selecciones. Observando cada uno de estos equipos sí encontramos cierto patrón común: excepto Argelia, que cuenta con un entrenador local, el resto de combinados africanos cuenta con seleccionadores extranjeros. El brasileiro Parreira dirige a Sudáfrica y cuatro europeos hacen lo propio con Ghana (Rajevac), Nigeria (Lagerback), Camerún (Le Guen) y Costa de Marfil (Eriksson), lo cual, probablemente, no quiera decir nada, aunque también podría plantear la duda de que si un entrenador doméstico, por cercanía, por conocimiento de la idiosincrasia de los jugadores, etc, sería capaz de sacar de estos un mejor nivel colectivo.

Estaremos atentos al comportamiento de Costa de Marfil frente a Brasil esta noche. En este momento, tras el buen partido que hicieron ante Portugal y en función de su plantilla, pasa por ser la gran esperanza del futbol africano en este mundial.

sábado, 19 de junio de 2010

La importancia de llamarse Undiano

Suele decirse que cuando el diablo se aburre mata moscas con el rabo. Algo así está sucediendo a este corresponsal con los pobres espectáculos que está presenciando en la Copa del Mundo de Sudáfrica. Según reseñan los cronistas ayer hubo un buen partido, el que enfrentó a los Estados Unidos y Eslovenia, pero no es la característica principal de este campeonato: futbol anodino, lento, pastoso, carente de mordiente… siendo el resultado final el más atroz de los aburrimientos.

Afortunadamente, este juego dispone de mecanismos correctores para que la fiesta no decaiga. Y no hablamos de uno, sino de tres. A veces, se suma un cuarto al sarao, incluso este año, en un gesto nunca suficientemente agradecido, la UEFA nos regaló dos más. Si Ud, amable lector (o lectora), ha llegado hasta aquí, sabrá que me estoy refiriendo a esa figura mitológica, mitad deportista, mitad showman, llamada árbitro.

Abrió ayer la jornada uno de los más reputados, sobre todo por estos lares, navarro y, a su vez, azote de navarros (especialmente aquellos que visten de rojo y blanco): Undiano Mallenco. No fue una casualidad que Undiano se erigiera en el protagonista del Alemania – Serbia y que pusiera patas arriba a una de las favoritas del campeonato, no. El arbitraje de ayer se madura poco a poco, como los buenos caldos en barricas de roble, asentándose en una de las mejores tradiciones de la historia del futbol internacional. Seguramente Undiano, cuando expulsó a Klose, tenía en su mente dedicar esa tarjeta roja a aquellos pioneros, sin cuya decisiva trayectoria él nunca hubiera llegado a arruinarle el Mundial a ninguna selección. Sirvan estas líneas como entrañable homenaje a aquella casta indomable de árbitros que tan gloriosamente hicieron salir por la puerta de atrás a selecciones que sólo se caracterizaban por jugar bien.

Sería imperdonable no acordarnos de Augusto Lamo Castillo. Haciendo honor a su nombre, uno se emociona al recordar la forma en que se llevó por delante a la URSS en el Mundial de 1982. Una calurosa tarde en la que se midieron en el Sánchez Pizjuán sevillano la maquinaria soviética de los Blokhin y Dassaiev y la canarinha de los Falcao, Zico, Socrates, un árbitro, Lamo Castillo, fue el gran protagonista. Los brasileiros se impusieron por 2-1, con dos penalties escamoteados y un gol anulado a los soviéticos, que habían merecido ganar. No sería justo dejar de recordar a esas figuras poco reconocidas pero sin las cuales el árbitro no sería capaz de administrar tanta injusticia: los linieres. Acompañaron aquel día a nuestro heroe dos perlas, una con una trayectoria también muy brillante, García Carrión, y otra cuyos mejores momentos estaban por llegar aún: Sánchez Arminio.

Cuatro años después, en México, volvió a brillar un trencilla español, con igual sujeto pasivo: la URSS. Repitió Victoriano Sánchez Arminio como juez de linea, esta vez a las órdenes de un colegiado sueco, Frediksson. A falta de un suspiro para finalizar el encuentro, Ceulemans recibe el balón en posición adelantada. Sánchez Arminio levanta la bandera para señalar el fuera de juego, pero la jugada sigue porque el árbitro no se ha percatado y acaba en gol del jugador belga. Los soviéticos ven, atónitos, cómo el juez de linea ha bajado la bandera y da por bueno el tanto de sus rivales. Por segundo campeonato consecutivo una decisión arbitral dejaba fuera a la URSS, una de las grandes favoritas para el triunfo final.

El predecesor más cercano de Undiano tuvo su momento de gloria en Alemania hace cuatro años. Luis Medina Cantalejo puede considerarse como uno de los más activos partícipes del triunfo final de Italia. Discurrían los octavos de final de muy mala manera para los transalpinos ante una sorprendente Australia cuando, en el minuto 93, Medina señaló un sorprendente penalty por un derribo a Grosso en el area aussie que sólo él vió. Hidink, entrenador por aquel entonces del combinado australiano, seguramente le tiene presente en sus oraciones cada vez que se va a la cama.

Pero Undiano, destacado y precoz aprendiz de pitero, no sólo ha tenido maestros de la casa en los que fijarse. Apenas era un jovencito en 2002 cuando, al poner la televisión, la radio o al leer el Marca, tuvo la ocasión de ver, escuchar o leer las grandes hazañas de Al Ghandour haciendole la puñeta a la que con el tiempo sería conocida como La Roja (por entonces, con Camacho al mando, aún era La Furia). Los adjetivos calificativos y descalificativos, más de estos que de los otros, del que el trencilla egipcio fue objeto por la prensa española hizo reavivarse la llama que Undiano llevaba dentro. Sus más allegados pueden atestiguar aquel momento en que el joven colegiado vió la luz: “Algún día yo también anularé un gol en un mundial, expulsaré a un delantero alemán o pitaré un penalty inexistente a favor de una de las favoritas…¡sé que lo conseguiré!”.

Y como no hay peor cosa que decirle a un navarro que no es capaz de hacer determinada cosa, alguien, imprudentemente, debió decir: “Pero Alberto, hombre, no será mejor que estudies para ingeniero y te dejes de problemas, porque igual para esto no vales…”

Serengeti Street Blues!

Miercoles, 16 de Junio.

09:00 AM (Hora Zulú).

Salgo de Porto Amelia, rumbo a Namialo, en un destartalado Jeep.

09:30 AM (Hora Zulú).

Control de carretera del autodenominado Frente Liberación Mozambiqueño.
Me incautan el portátil, que amablemente Ambigú Press había puesto a mi disposición, previo pago, para cubrir el evento.

10:30 AM (Hora Zulú).

Control de carretera del autodenominado Frente Mozambiqueño para la Liberación.
Me incautan el móvil.

11:30 AM (Hora Zulú).

Control de carretera del autodenominado Lateral (Zurdo) Mozambiqueño para la Banda.
Me incautan el Jeep, las gafas de sol y la "Visa Ambigú"

12:30 PM (Hora Zulú).

Continúo, a pie, mi camino, bendiciendo mi suerte por que en ningún control me incautaron los zapatos, disfrutando del paisaje, con el ánimo ligero y las manos en los bolsillos!

12:35 PM (Hora Zulú).

Decido que estoy cansado de caminar, me siento en una piedra de la cuneta y me dispongo a hacer a auto stop, para lo cual hago gala de mi mejor sonrisa... dadas las circunstancias...

15:47 PM (Hasta las pelotas de los Zulús...)

A lo lejos veo venir el primer coche, me planto en el medio de la carretera y consigo que pare.
Trás intensas negociaciones, yo hablando en Castellano y el conductor en su idioma (sea cual fuere...) me subo a la parte de atrás del vehículo tipo ranchera y emprendemos viaje.
Por el camino, y a través de la radio, creo entender que "La Roja" ha ganado 1-0 a unos animosos Hondureños que nunca se dieron por vencidos!

16:01 PM

Comienza el partido en Durban. Juega la Selección Española.
A mis compañeros de viaje no parece importarles mucho, pues cambian de emisora y empiezan a escucharse los acordes del Yeke Yeke de Mori Kante.

16:02 PM

Los acontecimientos del día empiezan a hacer mella en mi cuerpo y acunado por la música tradicional africana decido echar "una cabezadita" y reponer fuerzas.

03:16 AM

Me despierto sobresaltado por un rugido que casi me arranca el corazòn del pecho.
Me quedo sentado y al mirar a mi alrededor descubro que estoy en un pequeño claro de un bosquecillo.
Sorprendido, miro mi reloj y me doy cuenta que también ha sido incautado. (Imagino que en pago por el paseo en coche...)

Voy ajustando mi vista a la oscuridad y cálculo la hora por la situación de Orión.

03:30 AM

Me pongo en camino (no se hacia donde) con calma y mucho cuidado, pues el anterior rugido aún me tiene sobrecogido el corazón.

Tengo una extraña sensación.
Durante mi "cabezadita" creo haber soñado que España perdía con Suiza y que los ayatolahs del tiki taka sufrieron un sincope ante la ineficacia de la posesión del 94%... Imagino que sólo habrá sido un sueño propiciado por los camarones en mal estado que desayune el dia anterior y que esas cosas son imposibles. Un equipo animado por 46.000.000 de aficionados no puede perder, de ninguna manera con unos Suizos... por muy bollos que fuesen estos.

05:19 AM

Comienza a amanecer y me quedo anonadado ante la belleza del paraje en el que me encuentro.

Llego a un poblado, aún maravillado por todo lo que me rodea, y trás superar con dificultades el asalto de una marabunta de niños que vociferan como vuvuzelas, una holandesa se reune conmigo y me da la bienvenida al Serengeti Migration Camp, en la Masai Mara Reserve

Me informa que es sábado y no jueves como yo creía (parece que mi "cabezadita" fue mas prolongada de lo que yo pensaba), que Alemania ha perdido con Serbia, Inglaterra ha empatado con Argelia y que "el Vasco Higüaín" ha anotado un Hat Trick en la victoria de Argentina.

08:04 AM

Repuesto mi animo gracias a un "desayuno continental" amablemente preparado por el hechicero del poblado, y sin dar mucho crédito a la holandesa en sus informaciones sobre el Mundial, y dado que en lugar de acercarme a Sudafrica me voy alejando paulatinamente, me tomo las cosas con humor y decido seguirle la corriente.

la holandesa se me declara seguidora "de toda la vida" del Athletic y se pierde divagando sobre la conveniencia o no de fichar un nuevo lateral zurdo donostiarra, la idoneidad de la continuidad de Caparrós y su total rechazo al traspaso de Yeste al Manchester United.

Pienso que aún estoy soñando y me pellizco, pero no, estoy despierto y me empieza a doler mucho la cabeza...

!Qué bien estaba yo en Tenerife y comentando los partidos desde el sofá!... total, quién se iba a enterar? Pero no!... tuve que hacerme el gallito y venir a Africa! Hay que joderse con mis ideas de bombero!

En fin, trás tirarle los tejos, por activa y por pásiva, a la holandesa y ser rechazado (educadamente... pero rechazado) decido continuar viaje... "rumbo a lo desconocido", asi que les doy las gracias por todo, les pregunto donde está el Cibercafé mas cercano y me voy con el ánimo ligero y las manos en los bolsillos.

Mientras camino, voy bendiciendo mi suerte por haberme quedado dormido y haber evitado ver 9 tostones,... digo partidos del Mundial que podrían haber hecho mella en mi, ya de por sí, decaído estado de ánimo.

Voy caminando sin un rumbo fijo, así que no se muy bien desde donde informaré (ni siquiera sé si informaré de algo), pero intentaré hablar de futbol...

viernes, 18 de junio de 2010

Final manomanista 2010

Dicen que Jose Maria Palacios “Ogeta” era casi tan buen pelotari como compañero de barra de bar. Según comentan, el “ciclón alavés” se desenvolvía con igual elegancia con un vaso en la mano que colocándose los tacos en vestuarios. Los años cincuenta fueron de Ogeta. Precursor del juego de ataque y a la ofensiva, los frontones se llenaban a su paso, destacando por primera vez en la historia y ante el escándalo de gran parte de la cátedra la presencia femenina en las gradas. Cuentan que no era raro verle asomarse a contracancha después de tener de “recadista” a un rival durante un tanto…y lanzar un guiño a alguna voluptuosa lozana de las primeras filas. Precursor del gancho de izquierda con efecto para que la pelota saliera disparada, obligó a los promotores a desplazar las sillas de contracancha varios metros de la linea de falta, dado que con bastante frecuencia la pelota era recogida por un espectador antes del segundo bote.

Campeón del manomanista en 1958 y 1959, en 1960 se cruzó en su camino Hilario Azkarate el zurdo de Elorrio. Desde esa final a la que Ogeta llegó “después de dos noches enteras sin dormir por culpa de una mujer de Melilla que me volvía loco”, comenzó el lento e inexorable declive en la carrera del monstruo gasteiztarra.

Más adelante y en una de las magníficas retrasmisiones televisivas que nos brindó antes de su muerte el 21 de abril del 2002, Ogeta manifestó que su perdición en la cancha fueron las mujeres, los bares y los zurdos, por este orden.

Traigo esto a colación en la previa a la gran final, esperada por todos los pelotazales con indisimulada ansiedad durante todo el año. Se enfrentan la gran estrella de la pelota a mano actual (Juan martinez de Irujo) contra un gladiador de las losas (Yves Sallaberry “Xala”).

A priori, y como todos los partidos en los que toma parte el “león de Ibero”, parece que no hay color. La cátedra está claramente con él. El de Ibero es favorito para el dinero allí donde compite, finales incluidas. De las 12 que ha disputado como profesional, en 11 ha saltado de blanco a la cancha con el dinero a su favor. La del domingo contra Xala tampoco va a ser una excepción. Se cantarán doble a sencillo por su color en las tablas del Ogueta. El de Ibero, su juego, su competitividad y su mejora progresiva gustan al apostante.

En las cuatro ocasiones que los dos pelotaris se han enfrentado mano a mano, tanto a todo frontón como dentro del Cuatro y Medio, el delantero de Ibero le ha derrotado con claridad al zurdo de Lekuine. La última un contundente 22-4 que le endosó Irujo al de Iparralde en los cuartos de final del mano a mano del año pasado en el Labrit.

Todo el mundo parece coincidir en que el único enemigo que Irujo puede encontrar en un frontón es el propio Irujo. Se ha llegado a oir que si un partido con Irujo acaba 22-21, Irujo habrá hecho 43 tantos.

Sin embargo he traido a colación a Ogeta, frontón donde por cierto se va a desarrollar el partido, para recordar algo que también le sucede a Irujo, reconocido por el mismo: “Desde pequeño no me gustan los zurdos. Casi todos tienen esa botibolea que me ha despistado siempre y no entro de aire como me gustaría. Había un niño zurdo pequeñito que siempre me hacía la vida imposible de chaval”.

Probablemente Irujo gane el domingo, seria lo lógico desde luego, pero yo no le doy tan poco chance a Xala. Tiene nervio, un buen “latigo”, todos los recursos para el juego rápido que da el haber crecido en un trinkete y sobre todo….un hambre terrible de ganar una vez superadas por lo visto (parece ser) sus momentáneas e impresionantes lagunas mentales sobre las tres paredes.

Veremos y el frontón (y el material) pondrá a cada uno en su sitio.

El "diablo" sobre ruedas...

No es que le haya cogido asco a los suizos por la derrota del miércoles, ni mucho menos... lo que pasa es que soy tan aficionado al ciclismo ke me apena mucho ver lo ke estoy viendo desde hace años en este deporte... sino es "jeringazo de hematíes en vena" es ahora "inyección de caballos en el cuadro"...

Me gustaría que visionaseis este video y me dijeseis si creeis que lleva en la bici un "fuera a borda",... o pensais ke lo de Cancellara es "natural", fruto de la preparación, una buena alimentación, etc...



Como se decía antiguamente con las motos,... para mí esta bici está "trucada"...

Los rivales se tiene que sentir al ver venir al "trailer" suizo como aquella pareja de matrimonio en la película televisiva del debutante Spielberg que da nombre a esta entrada...

jueves, 17 de junio de 2010

La Carbonero ¿distrae?



Haciéndome eco de lo que dice KROMA -está crecido- en otra entrada, parece que algún medio de la pérfida Albión la ha tomado con lo único aprovechable, junto con nuestros corresponsales, de la legión de periodistas destacados por los distintos medios nacionales para cubrir a la roja: Sara Carbonero.

España no perdió porque jugara mal, ni porque haya perdido su baraka, ni porque la 'roja' esté de capa caída, ni porque Suiza jugará mejor, ni mucho menos. Según el diario británico 'The Times', España perdió por culpa de la periodista Sara Carbonero, novia del capitán de la selección, Iker Casillas.

Por muy sorprendente que pueda parecer y, aunque antes de que viajara el equipo a Sudáfrica ya se hablaba de cómo iba afectar la relación de la periodista y el portero en el Mundial, el diario lo tiene muy claro. Incluso lo lleva a su portada con el titular: 'Goalie's girlfriend starts the Spanish Inquisition' -'La novia del portero pone en marcha la Inquisición española'- y una fotografía de Carbonero entrevistando a su pareja tras finalizar el partido.





El capitán de la 'roja', visiblemente decepcionado, sólo pudo contestar que no comprendía lo que había sucedido: "No comprendemos lo que ha sucedido, porque es ilógico". La primera entrevista de la novia al novio fue triste y frustrante. El horno no estaba para bollos tras la derrota.

En sus páginas interiores la cosa no mejora para la periodista. Acusa a la periodista de distraer al capitán y lo ilustran con una imagen de ésta detrás de la portería de Casillas, mientras él para un balón.

El periódico habla de su relación, de la belleza y 'glamour' de la subdirectora de Deportes de Telecinco, de las especulaciones sobre la influencia de la periodista sobre Casillas y de cómo tras la derrota innumerables webs planteaban la misma pregunta: ¿Esta Casillas pensando en "otras cosas"?


Pocos días antes de que la selección y el equipo de Telecinco viajarán al continente africano, cada uno en su papel, Carbonero tuvo que hacer frente a las noticias que apuntaban a que su belleza y su relación con Casillas podrían desestabilizar el Mundial. La periodista no lo dudó: "¿Qué voy a desestabilizar el Mundial? No tengo tanto poder".

Tenga la culpa o no la tenga Carbonero de la caída de España, la polémica ya está servida. son muchos los expertos que destacan el gol de Suiza como un error del portero. El diario Marca asegura que "el meta español no estuvo acertado. Debió salir antes a los pies de Derdiyok en el gol y debió hacerlo con las manos y no con los pies", mientras que 'Mundo Deportivo' destaca la "mala salida de Casillas".

Habrá, por tanto, que esperar al próximo partido contra Honduras para averiguar si Casillas está en las nubes o le tienen en las nubes, y esperar que la selección no vuelva a fallar.


Que la Carbonero distrae es cierto: si no que se lo pregunten a Camacho, soprendido durante la presentación de la cobertura que Tele5 está prestando al Mundial.

Camacho y Carbonero: Acción y reacción



P.S. Que Carbonero junto con Kaiser y Tao es lo único decente de los medios está tan claro que hemos recibido un alud de peticiones anónimas de que les concentremos, aislados, a nuestros dos corresponsales en compañía de la periodista de Tele5.

Lo curioso es que aunque son miles los mensajes, vienen tan solo de dos IPs distintas. ¿Quienes serán?